BRUSELAS. La historia se repite. Mientras la Unión Europea (UE) debate sobre la acogida masiva de refugiados y el aseguramiento de la cadena alimentaria, como consecuencia de la guerra en Ucrania, fuentes norteamericanas e israelíes hablan de la amenaza de las armas de destrucción masiva que Rusia está dispuesta a emplear. Se trata de las “nuke”, artillería con capacidad nuclear, que utiliza como chantaje para evitar la participación de las OTAN en el conflicto bélico. Esta amenaza ha estado presente en la cumbre de la OTAN que se ha celebrado en Bruselas en la que se ha dado cuenta de la concentración de fuerzas militares atlantistas en la frontera con Ucrania.
La primera de las tres cumbres históricas que se celebran hoy en Bruselas ha terminado con una declaración conjunta de la OTAN frente a la guerra de Rusia contra Ucrania. Sus conclusiones se ha debatido posteriormente en la reunión del G7 y en el Consejo Europeo, que cuenta con la presencia del presidente norteamericano, Joe Biden, como invitado especial. Los jefes de Gobierno de los países miembros de la OTAN, la mayoría pertenecientes también a la UE, han llegado divididos a la cumbre. Los países del Este son proclives a una intervención más abierta en el conflicto con Ucrania, mientras que el resto de Europa prefiere seguir con las vías defensiva y diplomática.
Fuentes atlantistas informan que Rusia “está lanzado por medios oficiales el argumentario para justificar ante sus ciudadanos el empleo en Ucrania de armas nucleares”. Al parecer, habría un “65% de probabilidades” de que Rusia utilice armas nucleares en Ucrania, ya que es la única forma de “conseguir alguno de sus objetivos”. En las últimas horas, Rusia ha perdido tres barcos.
En este sentido, los líderes de la OTAN han acordado este jueves reforzar la ayuda a Ucrania con el envío de equipamiento de protección contra ataques químicos y nucleares. Así lo ha confirmado el secretario general, Jens Stoltenberg, tras la cumbre extraordinaria en la que los aliados han reafirmado el apoyo a Kiev para hacer frente a la invasión rusa.
"La OTAN ha activado sus mecanismos de defensa ante un hipotético ataque de Rusia con armas nucleares, radiológicas, biológicas o químicas en Ucrania que pueda afectar a uno de los países aliados del Este”, ha anunciado el secretario general de la OTAN en la rueda de prensa posterior a la cumbre extraordinaria de Bruselas.
Los actuales 30 países aliados de la OTAN han concluido que la invasión de Ucrania por Rusia constituye “la amenaza más grave para la seguridad euroatlántica en décadas” y la condenan al tiempo que piden al presidente Putin “que detenga inmediatamente esta guerra y retire las fuerzas militares de Ucrania”, y que “Bielorrusia que ponga fin a su complicidad”, de acuerdo con la Resolución adoptada en la Asamblea General de las Naciones Unidas del 2 de marzo de 2022.
Tras pedir responsabilidades internacionales a Rusia, condenan “enérgicamente los devastadores ataques de Rusia contra civiles, incluidas mujeres, niños y personas en situaciones vulnerables” e instan a Rusia a “que permita el acceso humanitario rápido, seguro y sin trabas y el paso seguro de los civiles”.
Tras insistir en la política de desinformación del Kremlin, la declaración de la OTAN advierte de que “cualquier uso por parte de Rusia de un arma química o biológica sería inaceptable y tendría graves consecuencias”. La amenaza nuclear está sobre la mesa.
Desde 2014, la OTAN recuerda que “hemos entrenado a las fuerzas armadas de Ucrania, fortaleciendo sus capacidades y capacidades militares, y mejorando su resiliencia”. También reconoce que seguirán “proporcionando más apoyo político y práctico a Ucrania a medida que continúe defendiéndose” y la protección “contra amenazas de naturaleza química, biológica, radiológica y nuclear”.
Además, hacen un llamamiento a todos los Estados, incluida la República Popular China, para que “se abstengan de apoyar” a Rusia y de ayudarla “a eludir las sanciones". Concretamente, dice, “nos preocupan los recientes comentarios públicos de los funcionarios de la República Popular China”, al tiempo que les piden “que promueva una solución pacífica del conflicto”. El apoyo tácito de China se desprende de la declaración conjunta China-Rusia, del 4 de febrero pasado, cuando Xi Jinping. Manifestó explícitamente que estaba en contra de la expansión de la OTAN y de su política de bloques.
La OTAN ha ofrecido a los Estados miembros fronterizos con Rusia y Ucrania un conjunto de medidas y “apoyo personalizado”, que será debatido en abril por los Ministros de Asuntos Exteriores. Mientras tanto, recuerdan el artículo 5 del Tratado, de defensa mutua de “cada centímetro de territorio” aliado, en referencia a la posible intervención militar de la OTAN si las fuerzas rusas cruzaran la frontera a un país miembro.
Para ello, explican, “hemos activado los planes de defensa, desplegado elementos de la Fuerza de Respuesta de la OTAN y colocado a 40.000 soldados en nuestro flanco oriental, junto con importantes activos aéreos y navales, apoyado por los despliegues nacionales de los aliados”. Este despliegue se completa con “cuatro grupos de batalla multinacionales adicionales en Bulgaria, Hungría, Rumanía y Eslovaquia”, todos ellos países miembros de la UE. No obstante, añaden que se trata de medidas preventivas y proporcionadas, “no escalatorias”. En estos momentos, la OTAN ha desplegado ocho batallones y 150.000 hombres en sus fronteras, además de cinco grupos navales de combate y más de 200 aviones.
Por último, se declara que “la guerra no provocada de Rusia contra Ucrania representa un desafío fundamental para los valores y normas que han traído seguridad y prosperidad a todos en el continente europeo. La decisión del presidente Putin de atacar a Ucrania es un error estratégico, con graves consecuencias también para Rusia y el pueblo ruso”. Precisamente, en estos momentos, Rusia reconoce 9.800 muertos y 16.500 heridos.incluidos seis generales y más de 20 coroneles.
De otro lado, se habla de que la población rusa está dividida. Fuentes de la OTAN informan que el Kremlin ha destituido a mas de mil trabajadores y ya ha habido la primera deserción por parte del número dos de Exteriores, que habría huido a Turquía.