Hoy es 9 de octubre
VALENCIA. La patronal autonómica Cierval ha informado este lunes de que ya son 47 las organizaciones empresariales las que han suscrito el manifiesto empresarial ante la posible implantación obligatoria en la Comunitat Valenciana del sistema de devolución, depósito y retorno (SDDR) en envases de bebidas refrescantes, zumos, aguas y cervezas. Listado de organizaciones firmantes.
Tal y como publicó Valencia Plaza, Cierval y la Valenciana CEV hicieron llegar una primera versión de este manifiesto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para pedirle que parase el plan de Medio Ambiente. Esa primera versión ya contaba con las firmas de la Asociación de Supermercados Asucova -Mercadona, Consum, MasyMas, Dialprix-, la asociación de grandes empresas Anged -El Corte Inglés, Carrefour, Alcampo, Eroski-, la confederación de empresarios del comercio de la Comunitat Cecoval y otras seis grandes organizaciones sectoriales.
El sistema, según recuerda Cierval, implica el cobro al ciudadano de diez céntimos por cada envase que compre y que se le devolverá cuando retorne el envase vacío en los establecimientos donde se venden.
Según Cierval, la implantación del nuevo sistema que propone la Generalitat supone, entre otros inconvenientes, complicar la gestión y los costes para empresas y consumidores lo que directamente "lastrará la competitividad de las empresas en la Comunidad Valenciana y aumentará el precio de venta al público".
En el manifiesto se dice que las empresas sí están a favor de la implantación de medidas que contribuyan a mejorar los objetivos de recuperación y reciclado de envases, siempre que sean eficientes.
Los empresarios y asociaciones de Cierval opinan que en la actual coyuntura económica, "no se deben adoptar medidas que condicionen la competitividad de las empresas sin garantías de obtener unos resultados eficientes por lo que, antes de implantar el sistema SDDR, Cierval se pone a la disposición de la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural "para identificar las causas de las bajas tasas de reciclado en la Comunitat Valenciana y trabajar conjuntamente en el diseño y puesta en marcha de medidas dirigidas a mejorarlas".
Para CIERVAL, la propuesta de implantar el SDDR en la Comunidad Valenciana afecta a la unidad de mercado y complicará la gestión de las empresas al coexistir con el reciclaje aplicado en el resto del territorio español.
Además, crecen los costes de producción por la complejidad logística y de distribución, la diferenciación del etiquetado y la posible tasa administrativa.. La aplicación de SDDR afectará especialmente a las empresas de envasado de aguas y refrescos, cuya actividad tiene un fuerte impacto en el empleo local.
La implantación del SDDR, prosigue Cierval, obligará a las empresas de distribución y venta de producto (hipermercados, supermercados, comercio y hostelería) a habilitar y acondicionar espacios para el retorno de envases (desagües, electricidad, etc.) lo que supondrá mayor coste de las instalaciones, una pérdida de superficie de lineal, almacenaje y atención al consumidor.
También tendrían que modificar el sistema de gestión de caja por el importe aplicado en concepto de depósito y retorno del envase (exención de IVA, facturas, tickets, etc.). Entre los argumentos que Cierval incluye en el manifiesto para oponerse, destaca el incremento de los conflictos en caja por la revisión de las condiciones del envase retornado.
Finalmente, puesto que el establecimiento no tiene control sobre otros líquidos que haya podido contener el envase retornado, podría generarse riesgos sanitario por contaminación cruzada, complicándose la inspección sanitaria.
"Todos estos problemas cobran especial relevancia para los supermercados de barrio, el pequeño comercio, y los establecimientos de hostelería (restaurantes, bares, cafeterías y otros) con muy limitada superficie de local para las instalaciones de almacenaje de los envases y que deberán adelantar al consumidor el importe aplicado en concepto de depósito y retorno del envase", destaca la patronal.
Por todo ello, Cierval insta a la Generalitat Valenciana a "reflexionar" antes de implantar este sistema SDDR y se ofrece para, a través del diálogo con las organizaciones, "buscar mecanismos que permitan mejorar la eficiencia y las tasas del reciclado de envases".