VALÈNCIA. (VP) Cerca de 800 son las actas levantadas por la Policía Local de València desde que se declarara el estado de alarma el pasado 14 de marzo. El motivo: no llevar mascarilla cuando es obligatorio. Esto es, por ejemplo, cuando no se pueden mantener las distancias mínimas de metro y medio, en los trayectos de coche si los acompañantes no son de la misma unidad familiar, o en el transporte público, según han señalado fuentes de la concejalía.
Actualmente en la Comunitat Valenciana, el Gobierno valenciano ha abierto la puerta a imponer la obligatoriedad de su uso general en en las próximas semanas. El concejal de Policía y Seguridad Ciudadana de València, Aarón Cano, manifestado que la Policía Local seguirá sancionando y será “muy estricta en su uso porque es fundamental para evitar rebrotes en la nueva normalidad”.
“Ha costado muchísimo llegar hasta aquí y no podemos dilapidar el esfuerzo tan grande que han realizado profesionales sanitarios, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, toda la sociedad durante el confinamiento”, ha señalado Cano, que ha equiparado el uso de la mascarilla con el uso del cinturón de seguridad cuya obligatoriedad no se cuestiona desde hace años. “Es fundamental para evitar situaciones como las que están sufriendo otras ciudades”.
Desde la Concejalía de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de València también se ha anunciado un refuerzo policial y de voluntarios de Protección Civil en los barrios de Castellar, Benimamet y San Marcelino después de que la Concejalía del Ciclo Integral del Agua haya detectado índices más altos de coronavirus en sus aguas residuales. “Vamos a controlar todavía más el uso de las mascarillas en estos barrios por prevención, tenemos que anticiparnos todo lo que podamos a diferentes escenarios para proteger la salud de la ciudadanía” ha añadido Aarón Cano, concejal de Protección Ciudadana.