La Rambleta proyecta tres relatos íntimos en su cine 'a la fresca'

VALÈNCIA. Esta semana continúa ‘El mar que nos mira’, el ciclo de cine que La Rambleta dedica al Mediterráneo. Lo hará con un film inédito y dos perlas de autor que abordan tres relatos íntimos: el de una mujer, un hombre y una pareja. La Rambleta celebra su cine 'a la fresca' cada jueves, viernes y sábado de julio a las 21:30 horas.

Vergine giurata (2015) arranca en Albania, en un poblado obstinado en mantener unas leyes y costumbres dignas del medievo por el que somete a sus mujeres. Y el único modo de sortear todas las cárceles del ser femenino consiste en renunciar a tu sexualidad, mantenerte intacta, disfrazarte y vivir como un hombre. Laura Bispuri sigue el periplo de una virgen jurada, transformada y segura tras el ritual; tímida y confundida en un obligado exilio. Bispuri tiene la sensibilidad de retratar un ser humano que podría escapar pero prefiere encerrarla en una imagen, eludir un contraplano, dejar sin respuesta esas miradas constantes que la protagonista lanza fuera del encuadre.

Hedi (2016) es un joven tunecino condenado a desempeñar un papel, ocupar un lugar asignado por su familia, hasta que ve la oportunidad de abrazar una aventura nueva, arriesgada, rendirse ante el temblor de existir. Si se limitara a desarrollar este conflicto, Hedi jamás habría sido esa película maravillosamente compleja que es. Cuando la respuesta única y verdadera parece que nuevamente es el amor, surge otra fuerza aún más poderosa que barre con todo.

Tras ese título misterioso 5 x 2 (5 veces dos, 2004), se esconde una de las películas más atípicas de François Ozon. La premisa es fascinante: “El problema de las relaciones humanas es que siguen el rumbo de las olas, siempre hacia delante y en un movimiento progresivo y perpetuo”. Todas las historias de amor acaban mal en general, salvo que les demos la vuelta y las restauremos de derecha a izquierda, de rabo a cabo, de su fin al origen. Solo entonces se recupera lo perdido, los reproches caen, no se acumulan, la mente se abre, los cuerpos se enlazan y la comunicación fluye.