Mislata. Foto: Ajuntament de MislataVALÈNCIA. La Sindicatura de Comptes ha identificado problemas en la gestión económico-financiera del Ayuntamiento de Mislata durante los ejercicios 2021-2022. Entre las deficiencias encontradas destacan la falta de conciliación en el inmovilizado material, retrasos en la aprobación de presupuestos y omisiones en controles financieros. Además, se señalan incumplimientos en la contratación y en la Ley de Transparencia.
En el control formal de la rendición de cuentas y revisión financiera, se destaca la falta de conciliación entre la composición y valoración del inmovilizado material al cierre de 2021 y el inventario municipal, que no ha sido actualizado desde 1999 y está finalizándose, como el ayuntamiento ha manifestado al órgano. Además, se señala la ausencia de información en la memoria de las cuentas anuales del ejercicio 2021.
Por otra parte, la aprobación de los presupuestos de los ejercicios 2021 y 2022 se ha realizado con retraso con respecto al plazo establecido por la normativa y se ha vuelto a producir la omisión de un documento: el expediente de modificación presupuestaria de 2021, lo que ha limitado el alcance del trabajo de fiscalización. Cabe mencionar que en el Ayuntamiento de Mislata no se prorrogan los presupuestos, se aprueban dentro del ejercicio anterior; se pueden presentar alegaciones al mismo, lo que provoca retrasos en las aprobaciones definitivas dos meses.
A pesar de que las bases de ejecución establecen la sustitución de la fiscalización previa de los derechos por la toma de razón, el órgano interventor no ha llevado a cabo el control financiero posterior de estos. El control financiero es una competencia y responsabilidad exclusiva de la Intervención municipal y desde el gobierno se le ha puesto a disposición medios para que la propia Intervención realice la contratación que considere para que pueda cumplir con éste parámetro.
El Ayuntamiento no ha realizado ni el control financiero a posteriori ni el control de eficacia establecido en la normativa. Asimismo, en relación con el control financiero a posteriori, el Plan Anual de Control Financiero tenía prevista la revisión de gastos de personal y la contratación de servicios y suministros de tracto sucesivo, pero estas revisiones no se llevaron a cabo. De la misma forma, las auditorías de cumplimiento y operativa de la sociedad mercantil NEMASA tampoco se han realizado, incumpliendo lo estipulado en el RCI.
En cuanto al saldo de la cuenta denominada "Caja restringida," con un importe de 58.876 euros, que forma parte de la Tesorería, no está respaldado de forma adecuada. El Ayuntamiento no ha proporcionado la documentación necesaria para demostrar la naturaleza y el importe del activo contabilizado, lo que impide expresar una opinión sobre su existencia y valoración adecuada.
La fiscalización de la contratación revela que, aunque la actividad contractual cumple en general con la normativa, se encuentran deficiencias en algunos aspectos. La elección de la fórmula de valoración de ofertas económicas no está debidamente justificada y el Ayuntamiento incumple la Ley de Transparencia al no publicar información sobre contratos en su portal de transparencia. Este incumplimiento se refiere a la falta de publicación en su portal de transparencia de la información relacionada con los datos estadísticos sobre el porcentaje en volumen presupuestario de contratos adjudicados mediante cada uno de los procedimientos contemplados en la legislación de contratos del sector público.
El ayuntamiento alega que en materia de contratación, todos los contratos menores de los años 2021 y 2022 están publicados en la Plataforma de Contratación del Estado.
Como resultado de este análisis, el órgano fiscalizador emite diversas recomendaciones con el objetivo de mejorar la gestión económico-financiera del Ayuntamiento de Mislata. Entre ellas se incluyen la dotación de recursos adecuados a la Intervención, la elaboración de manuales de funciones y responsabilidades, y la depuración de saldos pendientes de cancelar. Estas medidas buscan fortalecer la transparencia y eficiencia en la gestión de los recursos públicos locales. Ante estas recomendaciones, el ayuntamiento contestó mediante alegaciones al borrador de la sindicatura, aceptándolas en su mayoría y aportando los comentarios que corresponden.
