VALENCIA. La startup Groopify, con sede en Valencia, cierra de forma definitiva. Así lo han comunicado en un mail a sus usuarios registrados. "Casi 3 años después de unir a los primeros grupos a través de Groopify y de haber creado una comunidad de más de 250.000 personas increíbles en 8 países del mundo, nos despedimos de vosotros", apuntan los impulsores de esta compañía que permite organizar quedadas entre amigos que no se conocen pero que tienen cosas en común.
En el mes de octubre, el juzgado de lo mercantil número 2 de Valencia firmaba la liquidación de empresa Miguera Labs SL, sociedad continente de Groopify. Según la resolución del magistrado, que quedó recogida en el Boletín Oficial del Registro Mercantil, se daba lugar a la conclusión por la inexistencia de bienes aunque dejaba el plazo abierto para la interposición de recursos por terceros.
A finales de este mes, Groopify cesará todas sus operaciones. Según detallan, a futuro parte del equipo que creó Groopify pasará a formar parte de Paktor, el grupo independiente líder en social discovery y mobile dating en Asia y Latinoamérica.
"La súbita irrupción en el vertical de social dating de un player como Tinder (con decenas de millones de usuarios a nivel global, una marca reconocida y las ventajas de pertenecer a IAC/Match, la plataforma líder de dating a nivel mundial) así como el hecho de ser aún una startup sin un modelo de financiación auto sostenible y que depende de financiación externa para crecer, han hecho que fuera muy difícil seguir luchando por materializar nuestra visión de manera independiente", reconocen.
"Estuvimos muy cerca de cerrar una ronda de dos millones de euros que nos hubiera permitido pisar el acelerador y con la que hubiéramos sido capaces de competir cara a cara. A pesar de tener gran parte de los fondos comprometidos, la transacción no se llegó a cerrar y nos quedamos sin dinero. Tan sencillo como eso". Esta startup fue acelerada en Plug and Play, Lanzadera e invertida por Grupo Zriser, entre otros.
Latinoamérica fue la primera región elegida por Groopify para emprender su proceso de crecimiento internacional llegando ciudades como Santiago de Chile, Sao Paulo, Río de Janeiro, Bogotá y México DF e inició actividad también en Australia (Sydney y Melbourne), Corea del Sur (Seúl) y Hong Kong. Su modelo de negocio pasaba por cobrar diez euros a los asistentes a sus quedadas, a quien se les concreta una ubicación y se les invita a la primera consumición.