VALENCIA. Tras la cancelación del polémico Máster en Terapias Complementarias Aplicadas a la Salud y Equilibrio Personal, la Universitat de València (UV) se enfrenta a otra complicada decisión. Ahora debe plantearse la continuidad del controvertido, aunque longevo, Máster en Medicina Naturista, Acupuntura y Homeopatía, cuyos contenidos clave rechaza parte de la comunidad científica.
A punto de concluir la novena edición de este posgrado y de iniciarse el proceso para una décima convocatoria, la institución educativa mantuvo el lunes distintos encuentros con las partes enfrentadas. De un lado, el vicerrector de Estudios de Posgrado, Rafael Crespo, atendió a los miembros de Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas (Apetp) y de otro, se entrevistó con dos de los directores del Máster, Gerardo Stübing y Rafael Torres, miembro de la directiva del Colegio de Médicos de Valencia, en cuyas instalaciones, además, se imparten las clases.
Desde la Universitat insisten en “la normalidad” de esta situación, puesto que todas las líneas de posgrado atraviesan un procedimiento preestablecido para nuevas convocatorias. Sin embargo, que se produzcan dos reuniones previas ya constituye una cuestión excepcional que cabría atribuir a la petición de los afectados, pero también al revuelo generado. El malestar entre docentes se evidenció durante un claustro en el que algunos profesores manifestaron sus reservas sobre los contenidos de dicho Máster.
Los plazos para evaluar una línea de posgrado están estipulados. El pasado 11 de febrero se constituyeron los departamentos y, a partir de ahí, deben transcurrir dos semanas para recoger todas las solicitudes. El Máster de Medicina Naturista, Acupuntura y Homeopatía confirma que volverá a presentar su petición para otra edición. Cuando las candidaturas estén claras, habrá un mes para alegaciones internas –solo personal universitario–. Si hay profesores que manifiesten quejas, un subcomité específico se encargará de evaluarlas, pasar la lista a la Comisión de Posgrado y ésta, al Consell de Govern, que decidirá antes de verano.
Los organizadores del Máster confirman que volverá a presentar su petición para otra edición
Desde Apetp esperarán “para comprobar si este mecanismo interno de control de calidad funciona”, porque es previsible que los docentes aleguen, aunque recuerdan que durante nueve años “ya ha fallado”. Si bien valoran positivamente “la predisposición de diálogo de Rafael Crespo”, no comulgan con “la lentitud” de la entidad y admiten sentirse decepcionados porque la UV no se posicione oficialmente. “Durante la reunión intentamos dar con una respuesta formal, una postura pública y evidente, pero no la obtuvimos”, asegura Fernando Cervera, quien añade: “Se nos insistió en que la Universidad está de parte de la ciencia, pero en este Máster hay burradas demasiado grandes”.
En concreto, se refieren a contenidos como la terapia ortomolecular, que recomienda el consumo de grandes cantidades de bio-moléculas a los pacientes; la energía Qi, disciplina metafísica de la tradición china que consiste en impulsar energías para alcanzar la sanación; o la ozonoterapia, un tratamiento alternativo que habla de insuflar ozono dentro del enfermo, siendo la vía rectal la más habitual. Por todo ello, concluyen que el contenido del Máster "no solo es catalogable dentro del área de las pseudoterapias, sino que además ayuda a legitimar prácticas que, con la literatura científica en la mano, son peligrosas por si mismas. También son responsables directas de perjuicios en la economía de los enfermos”.
Alternativas vs Complementarias
Por parte de la UV, confirman que Rafael Crespo no dijo “ni bien ni mal ni a unos ni a otros”, sino que se limitó a trasladar “su respeto a los tiempos del procedimiento oficial”. Una postura paralela a la adoptada por el rector de la Universitat, Esteban Morcillo, quien ya advirtió a Valencia Plaza de que no se tomaría ninguna decisión sobre el Máster hasta no completar todo el proceso interno. Como médico, también matizó su opinión sobre las prácticas naturistas, y aseguró que si se estaban impartiendo como terapias alternativas en lugar de complementarias sería “inaceptable”.
Apetp no ve tan clara esta distinción. Para los afectados de esta organización lo criticable es que el tratamiento se ofrezca como remedio ante una enfermedad, ya sea a costa de abandonar la terapia médica asignada o de modo complementario a la misma. Para respaldar su argumento, remiten al código deontológico. “Según el artículo 25.3, la promoción de actividades preventivas sólo es deontológicamente correcta cuando tienen un valor científico probado. Por tanto, un médico no puede ofrecer un tratamiento si no hay evidencias científicas de su efectividad”, argumentan. Asimismo recuerdan que terapias como la Ortomolecular “no solamente son ineficientes, sino nocivas para la salud”.
EL RECTOR CONSIDERARÍA "INACEPTABLE" QUE SE IMPARTIERAN COMO TERAPIAS ALTERNATIVAS
Así, manifiestan un rechazo tajante a las llamadas pseudoterapias, y lo hacen “sin ningún tipo de excepción”, porque “en ningún caso sirven para complementar o perfeccionar algo, y además parten del supuesto de que engañar al paciente está bien”. También confrontan con el Colegio de Médicos de Valencia, desde donde respaldaron estas prácticas siempre que fueran llevaban a cabo por médicos. “Pero esto es todavía más grave, porque se le cuelga una etiqueta de credibilidad a algo que no la tiene”, y continúan, “detrás de todo esto no hay un interés científico, sino monetario”.
Queda por ver la postura de la Universitat de València, que si bien ha cancelado un Máster anterior relacionado con estas prácticas, lo atribuyó “a la falta de demanda”, y no manifiesta una opinión determinante sobre el actual. Desde la entidad insisten en convertirlo en una anécdota dentro de su funcionamiento habitual. “Nosotros ofertamos más de 100 posgrados, algunos de ámbito internacional, muchos con menciones de calidad. Lo que ha pasado con estos dos títulos es algo excepcional”, dicen. Habrá que esperar a la resolución. Como admiten desde la entidad, “aquí los plazos son lentos”.