ALICANTE. La industria agroalimentaria se ha convertido en una de las más innovadoras y ágiles a la hora adoptar medidas para solventar la actual crisis energética. Tras más de un año con constantes incrementos en la luz, el gas y los carburantes, el sector está realizando una fuerte apuesta por el autoconsumo fotovoltaico y las baterías para dejar de ver mermada su competitividad.
El sector figura entre los más activos del 2022 en cuanto a proyectos de autoconsumo se refiere. Una decisión importante para poder seguir produciendo con control y planificación, ya que el coste de la energía ha pasado de representar un 15% para muchas de estas empresas a sobrepasar el 40%, poniendo en jaque en muchos casos la viabilidad del negocio.
Cubierta Solar, empresa especializada en autoconsumo fotovoltaico industrial, ha registrado un importante incremento en la petición de proyectos y ejecución en la Comunidad Valenciana y Murcia. Empresas pioneras que no han dudado en dar el paso hacia las energías limpias, en especial en lo llevamos de segundo semestre del año, ante la posibilidad de un cierre de ejercicio con mayor presión.
El autoconsumo fotovoltaico y los sistemas de almacenamiento de energía (baterías) se han postulado como la mejor solución para la industria agroalimentaria y del frío industrial, que, por sus características, tiene elevados y constantes consumos energéticos.
Y es que, para una instalación de tipo, con unos 200 kWp, el ahorro puede traducirse en una media de más de 50.000 euros al año.
La Comunidad Valenciana y la Región de Murcia han sido muy activas en los últimos meses en la solicitud de proyectos. Zonas con gran presencia de compañías agroalimentarias que han dado el paso hacia el autoconsumo fotovoltaico.
Entre los últimos proyectos desarrollados por Cubierta Solar figura la alicantina Bras del Port. La empresa, especializada en la producción de sal para alimentación, ha instalado 315 kWp con los que apuntala su ahorro energético y refuerza su autonomía de la red eléctrica. Además de reducir en 186,3 toneladas de C02 al año sus emisiones a la atmósfera.
En esta lista de compañías innovadoras figura también Pompadour, empresa referente de producción de infusiones y tés, con la instalación de más de 800 paneles solares, y una potencia de 561 kWp o Bernabé Biosca Alimentación que también se sumerge en el autoconsumo fotovoltaico con una instalación de 109,5 kWp, con la que elevará su ahorro anual y dejará de emitir 65,96 toneladas de CO2 al año.
La instalación fotovoltaica combinada con sistemas de almacenamiento industrial (baterías) son ya el siguiente nivel y una realidad para empresas con grandes consumos. La entrada de proyectos que incorporan estas tecnologías ha comenzado a coger velocidad, con ejemplos en sectores como el textil, donde la empresa TexAthenea abandera el cambio de la mano de una batería de 2MWh.
Se trata de una llave para lograr ahorro y consumos 0 o mínimos de la red en horario diurno, cargando las baterías en los tramos en los que la luz es más económica. Una solución para la industria acompañada, además de importantes subvenciones para estas tecnologías que alcanzan hasta un 65%.
