VALÈNCIA. Los representantes de las asociaciones profesionales de artes escénicas y la asociación de gestores culturales, piden al President de la Generalitat que paralice de inmediato el desarrollo del convenio que el cesado Conseller Vicent Barrera firmó con la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, por el que se creaba un nuevo Circuit Cultural Valencià (CCV).
“Es el momento del diálogo de verdad”, han subrayado desde las asociaciones de artes escénicas, “entendemos que una vez ha sido cesado el señor Vicent Barrera, promotor de un Circuit en el que no estábamos de acuerdo ni los profesionales de las artes escénicas, ni los gestores de las poblaciones socias del CCV, se presenta un momento idóneo para emprender el camino del diálogo y del consenso”. Por lo que las asociaciones piden que se paralice la puesta en marcha del convenio firmado con la FVMP, se vuelva al sistema de funcionamiento anterior hasta acabar el ejercicio económico, mediante la apertura de expedientes administrativos para que el IVC tenga bien resuelta la contratación.
"Se debería trabajar desde ya en la definición de un nuevo modelo de Circuit que no pueda ser contestado por la abogacía de la Generalitat, pero que tenga como fundamento la cogestión del proyecto entre la Generalitat y los ayuntamientos, como se ha venido funcionando desde 1988", reza un comunicado.
Las asociaciones añaden que "para ello es imprescindible volver a la mesa del diálogo, por lo que los responsables de estas asociaciones, piden al President de la Generalitat que de las órdenes oportunas a los responsables del IVC, para que se les convoque cuanto antes, junto con la asociación de gestores culturales, la propia Comisión del Circuit y las asociaciones de profesionales de las artes escénicas, para trabajar en un nuevo modelo legal y consensuado que pueda empezar a funcionar el próximo año".
Desde estas asociaciones se informa al President también que de no paralizar el convenio impuesto por el ya cesado Vicepresidente Primero de la Generalitat, las consecuencias para los sectores de las artes escénicas y de la música en el presente son lamentables y en el futuro pueden ser funestas, porque sin lugar a dudas las compañías y los artistas estaban sufriendo y van a sufrir la aplicación de un convenio redactado a sus espaldas que en ningún momento ha tenido en cuenta la realidad cultural valenciana. Estas consecuencias negativas también van a afectar a las administraciones locales, tanto en su gestión administrativa como cultural, que verán afectada su capacidad de gestión, inversión y autonomía.
"Es un momento idóneo para que el president Mazón y el recientemente nombrado Conseller de Cultura, José Antonio Rovira, demuestren su capacidad de diálogo y su política de consenso. El sector profesional de las Artes Escènicas y la Cultura espera su respuesta", concluyen.