Las aspiraciones del primer DocsValència: el festival justifica el ‘hype’ con 34 estrenos

VALÈNCIA. La primera edición del festival DocsValència nace con cuentas pendientes y el deseo de generar un proyecto estable de futuro que hoy ve la luz cobijado por las instituciones públicas. La presente, una edición “exprés” que viene seguida de unas jornadas ‘cero’ celebradas el pasado mes de noviembre, tomará València el 11 de mayo, donde a lo largo de diez días proyectará 37 títulos en distintos puntos de la ciudad. Pau Montagud y Nacho Navarro, responsables del certamen, desvelaron ayer las cartas con las que juega el festival, en el que casi todas las cintas suponen estrenos en la ciudad –34 de 37, siendo cinco de ellos mundiales- y han sido seleccionadas, en el caso de la producción local, a través de una convocatoria abierta, siendo el método de invitación el seguido en el caso del apartado nacional e internacional.

Es esto último la primera cuenta pendiente de cara a la segunda edición, para la que esperan confeccionar toda su programación a través de convocatorias. Sí, segunda edición porque, aunque todavía no ha echado a rodar la primera, tanto sus impulsores como los representantes políticos presentes en el acto en el acto de presentación confirmaron su intención de convertir DocsValència en el festival de referencia de no ficción de la región. “Nace con la voluntad de ir creciendo tímidamente […] estoy seguro de que la fórmula será un éxito”, afirmó el secretario autonómico de Cultura y Deporte, Albert Girona, que estuvo acompañado por el diputado de Cultura, Xavier Rius, y la concejala delegada de Cultura en el Ayuntamiento de València, Glòria Tello. Si de mirar al futuro se trata, el propio Girona indicó que “no es una propuesta tan redonda como se quiere”, un festival que debería contar “un presupuesto de medio millón de euros en una situación de normalidad”, siendo el actual de 100.000 euros, un 80% proveniente de instituciones públicas.

Anunciado en 2016 y con una edición cero, de presentación, que tuvo lugar en noviembre de ese mismo año, los presentes en el evento eran conscientes del 'hype' generado en torno a la primera edición 'real' del festival. "Llevamos un año escuchando: ¿por qué un festival más en València?", expresaba Girona durante su intervención. Así, justificó la necesidad de un festival de "estas características", no un evento "de papel couché" sino centrado en la reflexión crítica. En similares términos se expresaron sus colegas, quienes destacaron la necesidad de apoyar al sector audiovisual tras el cierre de la radiotelevisión valenciana y en tanto que abre el nuevo ente.  

En cualquier caso, se trata de una apuesta “a largo plazo”, un festival que abrirá su primer año con una proyección inaugural suena a rock, de la mano de The Rolling Stones y la cinta Olé, olé, olé!: una viaje a través de América Latina (2016). La road movie, que se podrá ver el próximo 11 de mayo a las 20 horas en el Centre del Carme y el domingo 21 (21 horas) en la plaza del Patriarca, sigue a la mítica banda en su gira por Latinoamérica, que concluyó en un histórico concierto ante más de un millón de personas en La Habana. DocsValència empapará este año la ciudad con un total de 37 documentales, un festival multisede que proyectará cintas en una carpa instalada en la plaza del Patriarca, el Colegio Mayor Rector Peset, el Centre Cultural La Nau, la Filmoteca, Centre Octubre de Cultura Contemporània, la Fundación SGAE y el claustro gótico del Centre del Carme.

La Diputación se reivindica

Si de geografía se trata, otra de las cuentas pendientes de este primer planteamiento de DocsValència es su mayor presencia en la provincia. Así pues, fue el propio Xavier Rius quien desveló que cuando le fue presentada la propuesta consideró que llegaba “un poco tarde”, pues la Diputación había puesto en marcha una convocatoria de cine de no ficción que este año aumenta en un 30% el presupuesto. Del mismo modo anunció su intención de llevar a cabo reuniones técnicas para trasladar la actividad en el futuro a otros municipios además de la capital tras una primera edición “encorsetada” en la ciudad de València. Por lo que se refiere al presupuesto, tras una edición cero en la que la Filmoteca y el Ayuntamiento de València invirtieron 10.000 y 20.000 euros respectivamente, esta llega con un presupuesto de 100.000 euros aproximadamente de los cuales un 80% provienen de instituciones públicas y el resto de patrocinios privados.

En concreto el Institut Valencià de la Cultura asume 45.000 euros; el Ayuntamiento de València, 25.000 euros; la Dirección General de Cultura y Patrimonio aporta al total 12.000 euros y la Diputación de València 5.000 euros, una importante ayuda al festival de nueva creación si, por ejemplo, se tiene en cuenta que otros festivales valencianos como La Cabina suman algo más de 30.000 euros, incluyendo en este caso también al Vicerrectorado de Cultura de la Universitat de València. “Es nuestra obligación apoyar a aquellas iniciativas que sirvan para dinamizar el sector audiovisual valenciano, para poner en valor nuestra producción y contribuir a su financiación, difusión y distribución”, indicó Glòria Tello, quien añadió que “no sería bueno” que el festival siguiera dependiendo “en gran medida” de partidas públicas de cara a futuras ediciones.

Laboratorio y foro con profesionales

En esta primera edición se exhibirán treinta y siete producciones distribuidas en siete secciones. Además de las tres secciones a concurso (largometraje nacional, largometraje valenciano y cortometraje valenciano), habrá cuatro apartados no competitivos: Panorama –con obras procedentes de Suecia, México, Argentina, Estados Unidos, Suiza o Malasia–, Proyecciones Especiales, con los últimos documentales firmados por prestigiosos cineastas como Jim Jarmusch, –Gimme Danger, su particular revisión de la historia de The Stooges la banda rock liderada por Iggy Pop–, o Michael Moore, con su nuevo trabajo Michael Moore in Trumpland. La programación se completa con una retrospectiva dedicada al documentalista sueco Erik Gandini, responsable entre otros trabajos de Videocracy, Surplus o La teoría sueca del amor, y del que se podrá ver su nueva película The Rebel Surgeon.

Completa la programación la sección ‘L’espai de les xicotetes històries’, un rincón de historias para los más pequeños que, en palabras de Pau Montagud, “no es cine infantil sino cine documental, muchas veces protagonizado por niños y niñas, que no se ve habitualmente en televisión y que supone una buena oportunidad para ampliar y enriquecer la cultura audiovisual de los más pequeños”. Como complemento a las proyecciones de documentales, el festival pone en marcha dos proyectos dirigidos a los profesionales del sector: DocsLab y DocsFòrum. El primero supone un “laboratorio” para la producción y realización valenciana, un concurso para el que se han seleccionado una decena de proyectos que participarán de un taller a cargo del realizador mexicano Inti Cordera. A la finalización del certamen un jurado independiente otorgará un premio de 2.500 euros para impulsar la producción de uno de estos proyectos.

Por otro lado, la marca DocsFòrum será la que acoja las charlas con realizadores y teóricos del cine documental que envuelvan los 10 días de proyecciones. De esta forma, el sueco Erik Gandini abordará los entresijos del trabajo de investigación documental; el actor y documentalista Aitor Merino diseccionará su película Asier ETA biok, mientras Isaki Lacuesta (cuya película La propera pell recibió el último Goya a la Mejor Actriz de reparto, concedido a Emma Suárez) desarrollará su teoría sobre las fronteras entre realidad y ficción y Jon E. Illescas, sociólogo, escritor y artista plástico, presentará su libro La dictadura del videoclip. Para concluir, el realizador uruguayo Gonzalo Arijón esbozará el difícil retrato del oficio de documentalista, la directora y productora Mercedes Moncada profundizará en la importancia de la memoria y cómo ejercerla en el cine y el crítico e historiador Román Gubern proporcionará las claves del cambio de paradigmas en el cine de no ficción.