Hoy es 10 de octubre
VALÈNCIA. Algo se mueve en las escuelas de artes escénicas de València tras la primera movilización del profesorado y alumnado a partir de las graves deficiencias que padece el edificio desde hace más de dos décadas. Ayer se celebraron dos consejos de centro extraordinarios, tras los que se la ha solicitado a la Conselleria de Cultura una re-evaluación urgente de los los riesgos laborales y la paralización urgente del inicio del curso, que está previsto que empiece este mismo lunes.
Tal y como ha podido confirmar este diario, a diferentes niveles, el claustro de los tres centros están de acuerdo con tomar estas medidas, provocadas por las obras que se están desarrollando para sustituir los barracones que funcionaban como aulas, pero también por la suma de deficiencias que se han ido acumulando y que hacen, en su opinión, imposible el normal funcionamiento del curso.
Según uno de los escritos dirigidos a la Conselleria, la plantilla asegura que la situación actual "afecta a nuestra integridad de seguridad como trabajadores y a nuestra dignidad como docentes" y piden actuaciones urgentes para frenar el inicio de curso, y una evaluación que detecte los principales problemas estructurales y de funcionamiento de los tres centros y, consecuentemente, un plan de la Conselleria para solucionarlos.
Aunque ya ayer se pidió la actuación del Institut Valencià de Seguretat i Salut en el Treball (INVASSAT), cuyo último informe se emitió en 2016, tiene que ser la Conselleria la que lo autorice y lo tramite, por lo que no han podido sacar conclusiones hoy viernes.
Otro punto esencial es la última inspección a la instalación eléctrica, que detectó 10 deficiencias a resolver "antes de seis meses o inicio de la actividad". Con todo esto, el profesorado, junto al alumnado, han entendido que la situación del centro se ha hecho insostenible. Una indignación que se llevaba arrastrando desde hace años y que se ha despertado en las últimas semanas y se hizo público ayer a través de este diario.
Tras la publicación de la noticia, la Conselleria sí ha emitido una respuesta oficial, en la que recuerdan que "la situación de precariedad de este edificio no es nueva y el anterior Gobierno no tomó las medidas oportunas, sufriendo el proyecto un retraso considerable", mientras ponen en valor que "se han realizado obras de mejora en 10 aulas que finalizarán en breve y que han supuesto una inversión de más de 900.000 euros", si bien la realidad es que los centros han visto empeorar sus instalaciones considerablemente en los últimos meses.
Este miércoles la directora del Institut Superior d'Ensenyances Artístiques de la Comunitat Valenciana (ISEACV), Fani Blanch, visitó las obras junto al jefe de servicio y el equipo directivo de los centros. Fue ahí cuando se les trasladó la urgencia de una actuación, poniendo el foco en que las obras que se estaban realizando ni siquiera estaban valladas.
Este jueves se tomaron algunas medidas, aunque precarias; y ayer, una vez salió a la luz además que había trabajadores que no estaban adoptando las medidas básicas de seguridad, se han reforzado las medidas de protección. "Sobre las medidas de seguridad en las obras, que no han sido las oportunas, hay que informar que el nombramiento del coordinador de seguridad y salud es competencia de la empresa, no de Conselleria. Según informa la empresa, hoy mismo está ya regularizado", señalan fuentes oficiales.
En el consejo de dirección de hoy ha asistido la directora del ISEACV para escuchar a directores, profesores y alumnos "y explicarle la situación de este centro".