VALÈNCIA. El próximo 9 d'Octubre Alzira tendrá celebración por partida doble. No solo realizará el tradicional festejo por el día de la Comunitat Valenciana, sino que será el inicio de las Fallas en la ciudad, que se alargará hasta el día 12 de octubre. Cabe recordar que en agosto decidieron aplazar las fallas que, en un primer momento, estaban previstas de manera simultánea a València, entre el 1 y el 5 de septiembre.
Así, los actos de ambas celebraciones convivirán en las calles de la ciudad. Por lo que respecta al 9 d'Octubre, el consistorio ha anunciado que por la mañana se realizará el tradicional acto institucional y la ofrenda, en el que participará la Colla de Tabal i Dolçaina Les Raboses. Mientras que por la tarde será el momento dela actuación del Grup de Danses dʼAlzira. Además, también está previsto un concierto en el recinto ferial con las actuaciones de los grupos valencianos Zoo y Pupil·les.
Y, por lo que respecta a las fallas, la administración local ha comunicado las celebraciones previstas para los cuatro días en los que nueve de las comisiones de Alzira volverán a salir a la calle para quemar sus monumentos falleros. Según han detallado, está previsto que todos los días haya una macrodespertà seguida de un pasacalle y una mascletà en la Plaça del Regne.
El primer día de Fallas concluirá con la plantà de los monumentos, mientras que para el día 10 de octubre por la tarde está programada la entrega de premios y la tradicional Nit del Foc, que se repetirá al día siguiente. Además, el día 11 de octubre también celebrarán un concurso de pasodobles.
Por último, el día 12 de octubre, la ofrenda recorrerá las calles de Alzira y, a continuación, dispararán un castillo de fuegos artificiales a cargo de Coeters Dragón. Las fiestas se darán por concluidas con la cremà de los monumentos infantiles prevista para las 21 horas, y la de los monumentos grandes, a la 22 horas.
La decisión de aplazar la celebración de las Fallas y hacerlas coincidir con el 9 d'Octubre fue, según explicaron desde el ayuntamiento y la Junta Local Fallera, por la situación sanitaria que, en aquel momento, presentaba una incidencia de 304 casos por cada 100.000 habitantes. Así, consideraron que "lo más prudente" era aplazar la fiesta para más tarde. Ahora, los contagios han caído significativamente y la incidencia acumulada ya se sitúa en los 33 casos por cada 100.000 habitantes.