SANTA POLA. La compañía santapolera Liux avanza en sus planes crear coches eléctricos sostenibles con materiales biobasados e impresión 3D. Su primer prototipo ha sido el modelo Animal, que quieren que cuente con un 90% de materiales reciclados o de origen vegetal, con impresión 3D, que recorte tiempos de fabricación y ahorre hasta un 70% de energía y emisiones de dióxido de carbono. Más tarde, en abril de este año anunciaban su segundo modelo, Geko, que será un coche urbano con carrocería de lino. Ahora, desde la startup apuntan que su segundo prototipo ya "está en sus etapas finales de desarrollo".
De este modo, afirman que "con los palieres meticulosamente ensamblados, la espera está llegando a su fin". Este modelo de coche en ciernes "reduce la huella de dióxido de carbono un 40% frente al turismo eléctrico más eficiente y hasta un 80% frente a un SUV de gasolina", según sus creadores. Además, pesará unos 550 kilogramos y, entre otras prestaciones, tendrá autonomía de 150 kilómetros y la velocidad máxima será de unos 90 kilómetros por hora.
Sobre el montaje de este nuevo modelo, Liux ya tiene experiencia con su anterior prototipo, Animal. Y mantienen que "al enfrentarte primero a lo más difícil, el resto del camino se torna más llano. El prototipo de Animal se convirtió en el núcleo de todas nuestras pruebas y locuras. Experimentamos con diversos materiales, resinas y toda idea que surgía. Este proceso nos ha preparado para enfrentarnos a casi todo, y el resultado nos llena de orgullo".
La empresa, que se constituía en marzo de 2021 y que lanzaba su primer prototipo en noviembre de 2022 con el apoyo de inversores, tiene claro los siguientes pasos en su calendario: el lanzamiento de la primera producción en serie de sus coches a principios de 2024 y, después, a comienzos de 2026 la segunda fase de su fábrica con la que planean una capacidad de producción de 50.000 vehículos al año.
Su objetivo es levantar su fábrica en 2024 en la Comunitat Valenciana para desarrollar en serie sus vehículos con materiales vegetales. La primera piedra antes de llegar a la producción de decenas de miles al año. Los fundadores de esta firma son Antonio Espinosa (consejero delegado) y David Sancho (CEO de Producto) y ahora, desde la villa marinera y con un equipo de unas 15 personas trabajan por crear coches con materiales vegetales y biobasados en la carrocería del coche. Los moldes se imprimen en 3D y son pioneros en esta técnica y proyecto. Desde Santa Pola, su taller cuenta con perfiles en mecánica, soldado, diseño de desarrollo, ingeniería mecánica y producto que se emplean para conseguir el diseño de coche ideal con materiales sostenibles. Realizan además, matricería, usan realidad virtual en el desarrollo y alimentan y mejoran su inteligencia artificial.