ALICANTE. Más allá del cruce de declaraciones y manifestaciones en el que ha desembocado el futuro del grado de Medicina de la Universidad de Alicante, hay tres elementos que son los que están en disputa, son los que cuestiona la Universidad Miguel Hernández y son también los que pone en duda la Generalitat Valenciana. Se trata de la financiación del grado, de los docentes y de las prácticas. Estas son las mismas cuestiones que el rector de la UMH le trasladó a la ministra de Ciencia y Universidades, Diana Morant, en su visita a Elche. Y de estas mismas cuestiones ha hablado la rectora de la UA, Amparo Navarro, en su comparecencia de este martes. Navarro ve las tres cuestiones encauzadas y así lo replicaron tanto la Generalitat -antes del cambio de criterio- y la propia UA en sus contestaciones a la demanda de la universidad ilictana.
Antes de entrar en detalle, la rectora ha rememorado las razones por las que se decidió volver a solicitar el grado de medicina, 25 años después de la traumática segregación, que dio el origen a la UMH, ahora demandante en el litigio. Además de la demanda del grado, Navarro ha explicado la necesidad de los estudios con el objetivo de aportar soluciones sanitarias a la provincia de Alicante, con listas de espera y falta de facultativos. Y teníamos, según ha dicho, la experiencia de la Facultad de las Ciencias de la Salud, el profesorado, las instalaciones, departamentos interconectados, etc. "Todo eso también genera sinergías con la UMH", ha recalcado. "He compartido experiencias con la Facultad de Derecho de la UMH porque existe", ha añadido. "Y si implantamos el grado era para aportar, y con toda la legitimidad, y ninguna otra universidad se ha convertido en garante de la legalidad de los estudios; ni lo somos con otros; ni exigimos nada a cambio", en referencia al campus interuniversitario. "Siendo más, aportamos más", sostiene.
Sobre esta cuestión, la rectora ha explicado que en la memoria presentada se plantearon los recursos necesarios, humanos, económicos y las infraestructuras. "Hasta que no se autorizó el grado, no pudo contratar al profesorado. "Hemos contratado según han avanzado los cursos". Respecto a las instalaciones, nos comprometimos a construir el Aula de Anatomía, que era la única que no teníamos para comenzar los dos primeros cursos, ha detallado.
Sobre los recursos económicos, la rectora ha dejado claro que la financiación necesaria para arrancar los dos primeros cursos figuraba en la memoria y, hasta que no se autorizó el grado, no se ha trabajado en esa financiación extraordinaria. "Estamos luchando por una financiación extraordinaria, no solo para Medicina, sino para el resto de grados de la UA. Y el vicerrector de Estudios está luchando por ese plan de financiación, junto al resto de universidades de la Comunitat". El grado de Medicina no le ha quitado tampoco financiación al resto de universidades ni a la UMH", ha sentenciado.
Al hilo de la cuestión financiera, Navarro ha desvelado que con la aportación del Gobierno se logró financiación para aumentar el número de estudiantes de medicina. Se pasó de 75 a 86 alumnos, por lo que obtuvimos un millón de euros, según ha dicho. Ese dinero de 2023 y otros 500.000 euros de este año se han destinado al Aula de Anatomía, según ha añadido.
Respecto al personal docente de Medicina, que es otra de las cuestiones que pone en duda la UMH, la responsable del campus de San Vicente ha expuesto que todo el personal de los primeros cursos son docentes de la Universidad de Alicante. "Ya dimos cumplida cuenta de eso en la memoria. A partir de tercero, tendremos que contratar más y lógicamente no los podemos contratar con antelación". Al margen de ello, Navarro también ha apuntado que se han sacado plazas de profesores asociados y han tenido una buena respuesta y, por lo tanto, se han cubierto rápidamente. "Muchos médicos han concurrido a estos puestos".
En este punto ha desvelado la rectora que la Aneca, consciente de las necesidades de profesores en Medicina, ha creado una comisión de validación que potencia el ejercicio docente asistencial y clínico, con lo que los jóvenes médicos van a tener poca dificultad para tener su acreditación docente y poder concurrir a las plazas que se convoquen, tanto en la UA como en la UMH.
Según la rectora, también en la memoria de Medicina de la UA, se plantearon hacer las prácticas en una serie de hospitales, tanto públicos como privados. Se hizo así, según Navarro, porque una ley del 1983 solo permite que los hospitales puedan convenir las prácticas con una única universidad. Se puede autorizar a otra universidad si ésta lo autoriza. De esta manera, los hospitales tienen convenios con la UMH para Medicina, y con la UA, para Enfermería. "Esto no es obstáculo para compartir prácticas", según Navarro, que ha detallado que la UA siempre ha autorizado, con generosidad, las prácticas por ejemplo al CEU de Elche para que sus alumnos de Enfermería hagan prácticas en hospitales de Alicante.
Y sobre esta cuestión, ha recordado que existe una sentencia que permite que dos universidades compartan prácticas en hospitales, como sucede con la Católica y la UV en València. Hay dos modelos para solventar esta cuestión: o bien el modelo de Valencia, o bien el modelo de Madrid, en el que las cinco facultades de Medicina y cada una de ellas tiene un hospital de referencia, con un convenio que se renueva cada tres años… "Desde que nos concedieron el grado de Medicina, mi empeño era que el nuevo conseller de Sanidad y el de Educación decidieran qué modelo querían para las prácticas". En la provincia hay 26 centros sanitarios, 10 de ellos públicos, muchos de ellos acreditados para la docencia, y por lo tanto, no debería haber dificultades para que los estudiantes lleven a cabo sus prácticas clínicas", según ha explicado. A su juicio, hay soluciones encima de la mesa.
Y con todo ello, la UA considera que hay argumentos suficientes para apuntalar el grado de Medicina. Y así lo ha elevado al TSJ, que hay que recordar que en junio de 2023 ya rechazó la suspensión cautelar de los estudios de Medicina en el campus de Sant Vicent.