VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València dará luz verde este viernes al proyecto básico de las obras de restauración de las vidrieras del hemiciclo y la escalera principal de la casa consistorial. El proyecto, que aprobará la Junta de Gobierno municipal, busca devolver a su estado original estos elementos, y se hará por valor de unos 340.000 euros.
Según el proyecto, se incorporarán mejoras para facilitar el mantenimiento de las vidrieras, se sustituirán los vidrios y se reformarán los dos lucernarios exteriores, tanto del hemiciclo como de la escalinata principal. Con ello, también se garantizará su seguridad estructural y se sustituirá y reubicará el sistema de iluminación de las vidrieras.
"Tanto la vidriera como el lucernario presentan cierto deterioro y problemas de filtraciones", explica la edil de Recursos, Luisa Notario: "El sistema constructivo utilizado complica el mantenimiento del lucernario, afectando este a su limpieza y estanqueidad. La falta de limpieza de ambos elementos menoscaba las condiciones de eficiencia energética del actual sistema de iluminación", insiste la concejala.
Así pues, en cuanto a la restauración de la vidriera, se realizará por una empresa especializada que documentará el bien y la intervención realizada. Se referenciarán las piezas, que desmontarán para su limpieza y restauración con técnicas tradicionales; se repondrán faltantes en vidrios y se aplicará un tratamiento antióxido e ignífugo a la estructura portante.
También forma parte del proyecto resolver la ineficiente iluminación actual del hemiciclo. El proyecto, para subsanarlo, mantiene tanto en la escalinata como en el salón de plenos la iluminación ornamental y la complementa para obtener los niveles de iluminación necesarios con un sistema graduable.
En el caso del hemiciclo, se reubicará la iluminación actual de proyectores integrados en el espacio bajo cubierta situándolos en el perímetro de la sala y se complementará la iluminación de los palcos. También se instalará, tanto aquí como en la escalera, una retroiluminación con fin ornamental.
Como detalle, también se cambiará la iluminación de un lienzo protegido de Jaime el conquistador, pintado por Bernardino Alzamora en 1631, que se encuentra en la antesala del hemiciclo. Según el consistorio, la obra está actualmente iluminada por lámparas ornamentales que inciden en la apreciación del bien.
Hay que recordar que la casa consistorial cuenta con declaración de Bien de Relevancia Local (BRL) y que tiene su origen en antiguas edificaciones formadas por la Casa de la Enseñanza, del siglo XVIII, la antigua iglesia de la Cofradía de la Sangre, la antigua Iglesia de Santa Rosa de Lima y la ampliación iniciada en 1904 sobre los solares del derribado convento de Santa Tecla o exconvento de San Francisco.
El hemiciclo y la escalera principal son fruto de la ampliación y reforma llevada a cabo en el edificio entre los años 1915 y 1942. Por un lado, el hemiciclo ocupa parcialmente el antiguo patio claustral de la Casa de la Enseñanza y consta de estrado para la presidencia, graderío con 109 asientos y tribunas para público.
Su iluminación actual se produce a través de lámparas ornamentales situadas perimetralmente y a través de la vidriera en forma de abanico situada en el techo a gran altura. De esta forma, el espacio entre la vidriera y el lucernario que la cubre alberga un gran número de proyectores que fueron instalados con el objeto de mejorar la iluminación de la estancia inferior.
"La casa consistorial es un edificio monumental catalogado como bien de relevancia local, además de ser el lugar de trabajo de un buen número de trabajadores y trabajadoras municipales, por eso durante estos siete años hemos invertido más de un millón de euros en proteger y modernizar el edificio a través de diferentes actuaciones", explica Notario en este sentido.
Así, la edil recuerda la rehabilitación de las torretas laterales del edificio, la recuperación del carrillón -uno de los más simbólicos de la ciudad, inaugurado en 1930 pero que funcionaba mediante una grabación desde hacía tres décadas-, la adecuación de las dependencias de medicina laboral -que eran provisionales desde1989-, la restauración de la cristalera del vestíbulo -en la que no se intervenía desde hacía 30 años- o la restauración de más de 180 metros cuadrados de mosaico Nolla.
También se refiere la concejala de Recursos a la restauración de pinturas murales del salón Pompeyano, la reforma y ampliación de la oficina de turismo, la reforma de la sala de prensa y la renovación de la iluminación de la fachada. "Las intervenciones han beneficiado a la totalidad de la Casa Consistorial", explica la edil, quien destaca especialmente las acciones dirigidas a la modernización y eficiencia energética para ahorrar energía y dinero, "que han supuesto el cambio a alumbrado eficiente de la práctica totalidad de las luminarias del edificio".