VALÈNCIA (AGENCIAS). La salida de Vicent Marzà de la Conselleria ha provocado una revolución en el ámbito político, aunque no tanto en el área de Cultura. El ascenso de Raquel Tamarit dibuja un etapa continuista, especialmente en el sector artístico, pues el año que queda de legislatura estará marcado por un plan estratégico ya presentado y la llegada de unos fondos europeos en cuya gestión Tamarit fue una interlocutora clave. Tampoco habrá de crear nuevas relaciones con los centros culturales que dependen de su área, espacios que se conoce bien. Entre ellos, el Palau de les Arts. Este mismo jueves, durante la presentación del espectáculo de danza Titanas, el director artístico del colisero, Jesús Iglesias Noriega, ha alabado el “compromiso” de Vicent Marzà durante sus años al frente de la Conselleria, a quien ha agradecido su trabajo.
"Solo puedo agradecer la libertad para trabajar, el sentirme respetado y saber que hay un respeto por el profesional", ha declarado. Sobre la nueva consellera de Educación y Cultura, Iglesias Noriega ha subrayado que ha trabajado con ella en el “día a día” en tanto que secretaria autonómica y ha destacado el “empuje” de Tamarit para ponerse al frente de la cartera. "La mala noticia de la dimisión la corregimos con su nombramiento", ha declarado.
Las reacciones también llegan desde Alicante, donde han aprovechado para poner ‘deberes’ a la nueva consellera. Así, la vicepresidenta de la Diputación de Alicante y diputada de Cultura, Julia Parra (Ciudadanos), ha anunciado que pedirá a Tamarit que la Conselleria acabe con el "agravio cultural" que a su juicio "sufre" la provincia de Alicante. La nueva consellera no es una desconocida y, de hecho, Parra la califica de una persona “muy colaboradora”, por lo que demandará una próxima reunión con el objetivo de abrir “una vía de diálogo” para mejorar su relación con la provincia y conseguir una mayor inversión cultural, ahora “muy por debajo de Valencia y Castellón”, ha expresado en declaraciones recogidas por la Agencia EFE.
Para saber más
La Conselleria de Cultura culpa del retraso en las ordinarias al anterior equipo y promete estudiar "mecanismos para reorganizar las ayudas que no hayan salido este ejercicio"