El PP dice que son "la cuenta atrás" para que Puig sea expresidente y C's cree que "no tienen rigor"
VALENCIA (EP). El pleno de las Corts Valencianes ha rechazado este martes las enmiendas a la totalidad a los presupuestos de la Generalitat de 2017 presentadas por el PP y Ciudadanos, que creen que son "súper ficticios" e "irreales", respectivamente. Así, los presupuestos continuarán su tramitación parlamentaria, tras rechazar PSPV, Compromís y Podemos ambas enmiendas.
El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha pedido el voto favorable a la toma en consideración de unos presupuestos "claros" que apuestan por la "reconstrucción de la economía valenciana" y que tratan de "hacer mejor la vida de los valencianos de hoy y asegurar un futuro para los valencianos de mañana".
El diputado 'popular' Rubén Ibáñez ha asegurado que este año el Consell se ha "superado" con un presupuesto "súper ficticio" que es "la constatación de un gobierno fracasado, una llamada de salida" y "una cuenta atrás para convertir a (Ximo) Puig en expresidente y a su gobierno en oposición".
Ha justificado la enmienda en la "prepotencia, mentiras y opacidad" del Consell, al que ha acusado de actuar "a golpe de decreto" y de "pasar el rodillo por este parlamento" ya que sólo ha presentado dos leyes frente a 12 decretos hasta la fecha. "Casi un España-Malta, esa es la forma de poner en marcha su rodillo", ha dicho.
Además, ha proseguido, "miente y transforma la realidad bajo postureo, se rodea del mantra del Titanic bien cargadito de publicidad y propaganda" y cada semana hay "tres reparos de Intervención, al menos dos enriquecimientos injustos", la Vicepresidencia "fracciona contratos" y es condenado "por negar información a la oposición", por lo que "la gestión del Titanic es más que irregular", ha defendido Ibáñez.
El diputado ha criticado la inclusión de los 1.325 millones reivindicativos y la "subida de impuestos", al tiempo que ha advertido que "los inventos de hoy son los recortes de mañana", ha criticado la "opacidad" del presupuesto, que oculta que Presidencia "tiene 50 millones para contratos de acciones de comunicación y campañas de inserción publicitaria" y se ha preguntado "dónde está la Corporación Valenciana de Medios de Comunicación" en el presupuesto como tal: "Creo que no está conscientemente, para no saber el presupuesto, balance y memoria".
Desde el PSPV, el diputado José Muñoz ha comenzado su respuesta advirtiendo a Ibáñez de que "le han dado el presupuesto de 2014" y le ha acusado de haber pronunciado "una sarta de mentiras, falsedades, datos manipulados y tergiversación". "Asuman que están en la oposición y que hay partidos que venimos a decir la verdad", ha aseverado.
Ha reprochado a los 'populares' que hablen de presupuestos ficticios cuando ellos, por ejemplo, presupuestaron de 2008 a 2014 ingresos por más de 2.000 millones de euros en venta de patrimonio y ejecutaron 442.000.
"¿Hablan de presupuestos ficticios? Era lo que les gusta, tener presupuestos en a y en b; la contabilidad b es la que realmente funcionaba", ha dicho, para defender que las cuentas de 2017 ponen sobre la mesa la infrafinanciación con esos 1.325 millones.
También ha censurado que hable de presupuestos "poco fiables" el partido que "manipuló las cuentas públicas de déficit sanitario" presentadas ante Bruselas.
"Hay que verlo en perspectiva, los dos únicos Estados investigados Grecia y España, y España por culpa de ustedes", ha remarcado Muñoz, que ha reprochado que el Gobierno haya cobrado la multa de casi 19 millones a la Comunitat por la "gestión calamitosa" del PP.
Asimismo, ha criticado que Ibáñez "confunda presión fiscal con lucha contra el fraude" porque la recaudación en impuestos se ha incrementado por esa lucha y no por aumento de impuestos, ha dicho.
Por su parte, el diputado de Ciudadanos David de Miguel ha defendido la enmienda de su grupo dado que el año pasado dieron un voto de confianza y fueron "ingenuos" porque se ha demostrado que "esa irresponsabilidad forma parte de la razón de ser de este Consell".
Pese a admitir que existe un problema de ingresos, ha cuestionado los 1.325 millones "reivindicativos" y ha ironizado al instar a incluir directamente 2.400. "Això ho pague jo (Eso lo pago yo)", ha agregado, para alertar de "esas partidas fantasma nunca van a ser reales".
Así, se ha preguntado qué hará el Consell si esos millones no llegan: "¿Qué haremos, deuda, recortes, FLA o las tres a la vez?". En este sentido, ha indicado que en ese escenario "el problema de ingresos también será un problema de gastos".
Para De Miguel, las cuentas son "una declaración de intenciones que vemos imposible cumplir, un brindis al sol que adolece del más mínimo rigor presupuestario".
La diputada de Compromís Mireia Mollà ha criticado que se haga "broma" con la reivindicación del modelo de financiación porque "debilita la unidad de acción", se ha preguntado si PP y C's no confían en que esa reforma se produzca en 2017 y ha instado a los parlamentarios de la formación naranja a hacer enmiendas y detallar en qué parte del presupuesto recortarían esos 1.325 millones. Háganle el trabajo al señor Montoro", ha indicado, para remarcar que "hay que situarse, no vale trabajar en lo ambiguo".
Desde Podemos, David Torres ha indicado que pese a que a su grupo tampoco le gustan los presupuestos, los mejorará a través de enmiendas parciales y ha afeado a PP y C's que con sus enmiendas apoyan la ley de estabilidad presupuestaria "tan injusta" y ha alertado de que cada vez ambas formaciones se parecen más. "No quieran ser la cara simpática del PP", ha dicho a Ciudadanos.
José Muñoz ha admitido, por su parte, que la partida reivindicativa puede considerarse "poco ortodoxa" pero no ficticia porque esos ingresos presupuestados "dejan de ser ficticios en cuanto se convierten en realidad política de necesidad de financiación" y su eliminación "conllevaría muchísimo sufrimiento social". "No hagan seguidismo de ese PP que representa el pasado", les ha reclamado.