Puig dice que se hará "de acuerdo con los empleados públicos" y "de manera razonable"
VALENCIA, (AGENCIAS). Les Trobades de Escola Valenciana celebradas hoy en Valencia, Alicante, Guardamar y Puerto de Sagunto han reclamado el requisito lingüístico en la función pública, además de una educación en valenciano. Según han indicado fuentes de la organización, los cuatro encuentros de hoy han reunido a 44.500 participantes de 33 pueblos, que elevan a 183.000 personas la participación en las 15 trobadas celebradas en las últimas tres semanas.
Vivir en valenciano, generalizar la educación pública de calidad y en valenciano en todo el sistema educativo y en todos los centros, defender el valenciano en todas las administraciones y reivindicar una radio y televisión pública íntegramente en valenciano han sido las propuestas de estas Trobades, que este año cumplen 31 ediciones. Con estas jornadas, Escola Valenciana reivindica el valenciano como una herramienta de cohesión social y de vertebración territorial.
Muixerangues, pasacalles, pelota valenciana, cuentacuentos, danzas populares, talleres escolares, conciertos de música de la Gira, teatro, juegos tradicionales y exposiciones han atraído el interés de algo más de 44.000 participantes procedentes de 33 pueblos de las comarcas de l'Alacantí, la ciudad de València, el Baix Vinalopó, el Baix Segura i el Camp de Morvedre.
En la trobada de la ciudad de Valencia han participado el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el alcalde de la ciudad, Joan Ribó, que se han sumado a la reivindicación de la lengua y cultura valencianas. En Patraix, Puig ha encabezado la manifestación en defensa de la lengua y la educación pública y ha asegurado que la lengua "es un vehículo de convivencia, paz, cultura y libertad". El president de la Generalitat ha asegurado también que Escola Valenciana ha realizado una tarea "absolutamente memorable", ya que ha logrado realizar una reivindicación colectiva.
Con respecto al requisito lingüístico, el presidente de la Generalitat ha destacadola "normalidad democrática" que supone el "derecho de los valencianos a utilizar las dos lenguas oficiales, el castellano y el valenciano, y a ser atendidos en las dos lenguas", al tiempo que ha indicado que el requisito lingüístico en la función pública "se va a hacer de acuerdo con los empleados públicos y se va a hacer de manera razonable"
Al respecto, ha señalado que hay que ver "cómo se va resolviendo esta cuestión". "Lo queremos hacer claramente sin ningún tipo de fricción, pero atendiendo a los derechos lingüísticos de los valencianos", ha subrayado el jefe del Consell, que no ha precisado si la aplicación de esta norma se llevaría a cabo de manera retroactiva."No voy a entrar en lo que va a ser el desarrollo de esta norma, que no existe en este momento, lo que sí es evidente es que se va a hacer de acuerdo con los empleados públicos y se va a hacer de manera razonable", ha explicado Puig, quien ha afirmado que "lo que no es razonable en este momento es que los ciudadanos valencianos que tienen derecho a utilizar las dos lenguas, en un momento determinado, no lo puedan hacer. Se tiene que hacer todo desde el 'trellat --cordura-- valencià'.
Por su parte, el alcalde de Valencia, Joan Ribó, se ha mostrado "decididamente favorable" a la aplicación de esta norma y ha destacado la importancia de que "los funcionarios que están hablando con la gente de la calle conozcan los dos idiomas para que respondan normalmente en los dos idiomas". En este sentido, se ha referido a la necesidad de ayudar "en la formación" a los funcionarios y de "decir que el valenciano es una herramienta para servir a la ciudadanía". "Que el alcalde hable normalmente en valenciano" también es relevante, a juicio de Ribó, ya que, "eso ayuda a que la gente entienda que el valenciano es una lengua tan importante como el castellano".