'Libertad, libertad', el arte valenciano más comprometido en los años finales del franquismo

VALÈNCIA (EP). La Universitat de València (UV) inaugurará este jueves 29 en la sala Martínez Guerricabeitia del Centre Cultural La Nau la exposición Libertad, libertad. La década de los 70 en la Col·lecció Martínez Guerricabeitia: La política y más allá. València se convierte en la segunda ciudad que acoge este valioso proyecto expositivo que arrancó el año pasado en Castelló de la Plana.

La muestra parte de la representación mayoritaria de artistas valencianos dentro de un contexto, los años finales del franquismo, en el que València se convirtió en la capital española de cierto arte comprometido, explica su comisario, el crítico de arte y director de museos Juan Manuel Bonet.

Una década en la que se sucedieron el asesinato de Carrero Blanco, la muerte del dictador, el retorno de los exiliados y las primeras elecciones libres. Un total de 57 obras (35 gráficas y 22 únicas) se podrán visitar en la Nau hasta el 8 de septiembre.

Son piezas creadas por una decena de los artistas que conforman la colección de arte contemporáneo articulada por el matrimonio formado por Jesús Martínez Guerricabeitia y Carmen García Merchante que en 1999, en un gesto de mecenazgo "especialmente digno de ser subrayado", donaron a la UV.

'Libertad, libertad' es un homenaje a este matrimonio, al que el comisario esta unido desde 1994 cuando ejerció como jurado de la Bienal Martínez Guerricabeitia: "Pude comprobar su trabajo y el de su equipo en pro del arte contemporáneo. Nuestra relación se hizo más estrecha a partir del año siguiente, cuando fui nombrado director del IVAM. Periódicamente me visitaba, me comentaba las exposiciones que le habían interesado y reafirmaba su compromiso como mecenas del museo".

Jesús Martínez Guerricabeitia fue hijo de su generación. Con una infancia y juventud marcadas por la guerra y la represión franquista, la prisión a la que le condujeron sus convicciones le convirtió en un alumno curioso, con una mucha inquietud intelectual. Al reinventarse como un joven emprendedor, corrector y linotipista, a su vuelta a València en 1970 pudo permitirse concretar su antigua afición al arte a través de la adquisición de pinturas.

Gracias a su amplia red de amistades políticas, artísticas y literarias, el matrimonio fue conformando una colección que, inevitablemente, adquirió una vertiente política a través de la pintura emergente de los años finales del franquismo e inicio de la Transición.

"El principal valor de su colección es que no es 'clónica', como hay tantas, sino que está construida a partir de su visión personal y de su interés por un arte de carácter político, lo que tiene toda la lógica del mundo dada su condición de preso político y luego activísimo compañero de viaje del Partido Comunista", expone el comisario.

La nómina de artistas presentes en la muestra incluye la agrupación valenciana de Estampa Popular, donde surgió la corriente Crónica de la Realidad de la que participaron los equipos Crónica y Realidad, Genovés, Anzo o Antoni Miró. También aparecen el trío integrado por Boix, Heras y Armengol y los miembros del Grup d'Elx.

"Pop político"

"Todos ellos cultivan, en mayor o menor grado, un pop político. Es el momento del reencuentro de Josep Renau, exiliado primero en México y después en Berlín, con su tierra natal", señala el comisario y crítico de arte.

En el apartado gráfico de la exposición destaca la presencia de serigrafías realizadas por artistas abstractos como Arcadio Blasco, Michavila, Teixidor o Yturralde, muchas realizadas para carpetas destinadas a financiar a partidos políticos.

Cierran el recorrido histórico los trabajos de una selección de artistas nacionales e internacionales. Están representados el sombrío Fernando Somoza, Juan Barjola, José Luis Verdes, Gastón Orellana, José Ortega (fundador de Estampa Popular), José Duarte, el Canogar de los años en que practica la Crónica de la Realidad, Eduardo Arroyo (entonces exiliado en París) o Julián Pacheco desde Italia.

De la escena internacional, el italiano Spadari o el islandés Erró se inscriben en el mismo horizonte del pop político, mientras Wolf Vostell representa en solitario la estética Fluxus. En la parte gráfica, junto a grabadores de Estampa Popular como Ibarrola o Francisco Cuadrado, nombres internacionales (Lindner, Lichtenstein, Aldo Mondino o Lucio del Pezzo) y de nuevo abstractos (Hernández Pijuán, Ràfols Casamada, Saura, Tàpies, Salvador Victoria...) cuyo compromiso político los lleva a colaborar con carpetas de apoyo a los partidos afines.

La exposición, organizada por el Vicerrectorado de Cultura y Sociedad de la UV, la Col·lecció Martínez Guerricabeitia y la Fundació General de la UV, en colaboración con UVsocietat, Caixa Popular y el Ayuntamiento de València, se podrá visitar hasta el 8 de septiembre en horario de martes a sábados, de 10 a 14 horas y de 16 a 20 horas, y domingos y festivos de 10 a 14 horas.