MADRID, (EP). Los abogados de las familias de Rocío Oña y Belén Langdon, dos de las jóvenes muertas en el Madrid Arena, han acusado al promotor de la fiesta, Miguel Ángel Flores, de esconder las urnas que contenían el doble de las entradas permitidas para el evento celebrado en 2012 en el citado recinto que costó la vida a cinco jóvenes.
"En las cámaras se ve con toda claridad que (Flores) está delante de donde pasan una serie de operarios que están transportando cajas que contienen las entradas. Era plenamente conocedor de que esas entradas se ocultaron en el pabellón satélite", han señalado los letrados.
Los quince procesados por la tragedia del Madrid Arena, con el empresario Miguel Ángel Flores a la cabeza, se sientan hoy en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Madrid para responder ante la Justicia por la muerte de las cinco jóvenes la madrugada del 1 de noviembre de 2012.
Ha comenzado esta mañana en la 'sala cero' de la Audiencia Provincial y está previsto que se prolongue durante cinco meses. La Sección Séptima será el tribunal encargado de enjuiciar los hechos, que estará encabezado por la presidenta Luisa Aparicio Carril, mientras que la ponente será Ángela Acevedo.
Quince acusados se enfrentarán a peticiones de condenas de la Fiscalía que oscilan entre los cuatro años y los dos años y medio de prisión. Solicitudes de condena que no satisfacen a las familias, como tampoco que no haya ningún político procesado.
Se espera una gran presencia de medios desde primera hora de la mañana coincidiendo con la llegada de los acusados así como de algunos de los familiares de las víctimas que ya han anunciado que asistirán al inicio de la vista oral. No obstante, la primera sesión del juicio se iniciará con las cuestiones previas, que podrían prolongarse mañana, lo que aplazaría al jueves la declaración de Flores, que será el primero en responder a las preguntas de las partes.
Fuentes jurídicas han explicado que las partes tratarán de solicitar la inclusión de nuevas pruebas durante la formulación de las cuestiones previas, que es posible que se discutan a puerta cerrada. No será por lo tanto hasta la segunda o tercera jornada del juicio cuando declare el principal acusado en el caso.
Le seguirán los catorce procesados restantes hasta el 9 de febrero, en sesiones de mañana los martes, miércoles y viernes de cada semana. Después se dará paso al visionado de los vídeos y a la declaración de más de un centenar de testigos, entre ellos familiares de las víctimas mortales, heridos, asistentes a la fiesta que resultaron ilesos y policías nacionales y municipales.
Otros testigos citados son algunos empleados de las empresas de seguridad Seguriber y Kontrol 34, miembros del Samur y trabajadores de Madridec, que comparecerán antes del turno de los peritos y las pruebas documentales. Se espera que el juicio quede visto para sentencia en mayo.