Los adolescentes del tardofranquismo: un legado para la reflexión

ALICANTE, (EFE). El bagaje de uno de aquellos niños y adolescentes que vivieron los últimos años del franquismo ha sido recuperado ahora en un libro que pretende servir de reflexión, sin caer en la nostalgia, sobre cómo ha cambiado la sociedad española desde entonces y de memoria histórica para las nuevas generaciones.

"Contemos cómo pasó. Imágenes y reflexiones de una cotidianidad (1958-1975)" es el título de esta reciente propuesta bibliográfica, escrita por el catedrático de Literatura Española de la Universidad de Alicante (UA) Juan Antonio Ríos Carratalá, autor, entre otras obras, de un ensayo publicado hace un año sobre la represión franquista que sufrieron los periodistas tras la Guerra Civil.

En su nuevo trabajo, editado igualmente por Publicaciones de la UA, Ríos Carratalá (Alicante, 1958) ha dicho, en una entrevista con EFE, que intenta "darle una voz a la experiencia de la vida cotidiana de un niño (él)" en el tardofranquismo para "crear una memoria colectiva en torno a aquella época", pero sin caer en la tentación de la nostalgia y "hablando del pasado desde el presente".

La idea de escribir este libro, que "no es de memorias, surgió de ver la popular serie de RTVE 'Cuéntame cómo pasó', que aporta cosas sustanciales y que permite hablar de una parte de nuestra historia reciente, el tardofranquismo, en los términos que eran necesarios", ha señalado.

"Pero frente a la perspectiva unificadora de una voz decontextualizada que en esa serie nos cuenta cómo pasó ese periodo", Ríos Carratalá parte de su propio punto de vista para "indagar con humor e ironía acerca de aspectos comunes de la experiencia cotidiana" de "la primera generación que no pasó hambre y se educó con la televisión, eso sí, en blanco y negro".

"Invito a otras voces (de mi generación, personas de entre 55 y 60 años) a que se sumen a la mía para que, entre todos, contemos lo que pasó y cómo pasó aquello", ha expuesto Ríos Carratalá, quien ha indicado que su libro pretende también atraer a los jóvenes para que sepan "cómo era "el día a día" de la sociedad española hace medio siglo y "tengan conciencia de cómo ha cambiado desde entonces".

Doce personajes

La obra está estructurada en torno a doce personajes vinculados a los últimos años del franquismo que le sirven al autor como hilos conductores para evocar sus referencias deportivas, los programas de televisión, las canciones, los intérpretes cinematográficos... que le marcaron en su infancia y adolescencia.

La actriz Ágata Lys -icono sexual de mediados de los setenta-, el locuaz boxeador Pepe Legrá, el concursante en RTVE Rafael Canalejo Cantero -polifacético alcalde- o el letrista Jacobo Morcillo -autor de "La vaca lechera"- son algunos de esos protagonistas, cuyos datos biográficos en algunos casos se han extraídos gracias a Internet.

"Todos mis recuerdos de ese periodo son en blanco y negro (...) vivimos una época menos dura que la de la posguerra, pero, a pesar de los denominados 'felices sesenta', cada dos por tres teníamos la amenaza cotidiana del régimen franquista y su presencia en las cosas más pequeñas, ridículas y puramente anecdóticas", ha manifestado Ríos Carratalá.

Para este inquieto intelectual y militante de izquierdas, la suya ha seguido siendo una "generación sandwich", porque vivieron la dictadura desde la infancia y, luego, la Transición desde la adolescencia sin ser protagonistas, sino menores acompañantes, que, sin embargo, se erigieron en "observadores privilegiados".

Generacional

Además, "los productos culturales a los que teníamos acceso cuando éramos niños no estaban concebidos exclusivamente para nosotros y los teníamos que compartir en un ámbito familiar", ha destacado.

Ese tipo de situaciones permitía un diálogo intergeneracional, que "ahora se ha perdido brutalmente", según Ríos Carratalá, quien ha sentenciado: "Una realidad no se entiende si no tiene el componente de la dimensión histórica".

En la actualidad "estamos ante una generación con escasa conciencia histórica. Una de las cosas que más sorprenden de la gente joven es el 'presentismo' o el 'adanismo', el considerar que todo lo presente es nuevo, que no tuviera unos orígenes", ha opinado este profesor universitario.

"Vivimos ahora en la sociedad del espectáculo y las nuevas generaciones están más entretenidas. El estar entretenido no suele ser compatible con la reflexión", ha afirmado.