VALENCIA. Entre la política oficial y la personal, las reivindicaciones y las historias detrás de cada lucha. En esa balanza se sitúa XXX Lambda, relats íntims d’activistes LGTB, una exposición que, tal y como avanzó Cultur Plaza, repasa los treinta años de historia del colectivo de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales y que, además, se convierta en la primera del proyecto social del Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana (CMCV), que dedicará de forma permanente la sala Contrafuertes del Centro del Carmen a iniciativas de este ámbito.
El director del CMCV, José Luis Pérez Pont, y el coordinador de proyectos culturales de Lambda, Luis Noguerol, presentaron ayer la muestra, que recoge algunos de los carteles y publicaciones más destacadas de estos años, piezas que resumen las preocupaciones de época en el camino hacia la igualdad real. Y, precisamente, porque el activismo se nutre de nombres propios, la exposición recoge a través de tres pantallas los testimonios de algunos de sus representantes, entre ellos el ahora director de la Agencia Valenciana de la Igualdad en la Diversidad, José de Lamo. Su boda con el ahora concejal del Ayuntamiento de Valencia Sergi Campillo y la de la excordinadora de Lambda Luisa Notario y Nuria Cobo fue celebrada en un lugar curioso. Un casal fallero se convirtió en el espacio improvisado para celebrar ambos enlaces, que coincidían con la misa conclusiva del Encuentro Mundial de las Familias.
La asociación Lambda, que nació el 26 de septiembre de 1986, ofrece a través de estos testimonios un relato coral y diverso, con anécdotas y confesiones de vivencias personales producidas durante su trabajo como activistas contra los prejuicios y la discriminación, y en favor de la igualdad de la comunidad LGTB. Según Pérez Pont uno de los principios fundamentales sobre los que se asienta el nuevo proyecto para el Consorci de Museus como institución cultural es la igualdad, la igualdad de oportunidades, lingüística, de género y LGTBI. Precisamente este es uno de lo puntos recogidos en el proyectos con el que se presentó al concurso para dirigir el CMCV, ‘Apoyar el presente para construir el futuro’, que presentó esta misma semana y en el que especifica al colectivo LGTBI como uno de los que han de prestar especial atención para que sea representado en igualdad de condiciones.
“Con esta exposición iniciamos además una línea de trabajo en la que desde el Centre del Carme establecemos sinergias con la sociedad civil abriendo un espacio que es público a las asociaciones y colectivos valencianos”. De esta forma, se pretende que la exposición, que ya pudo verse este verano en Burriana, pueda llegar a otras localidades valencianas "con el objetivo de seguir haciendo visible la necesidad de caminar hacia una sociedad más respetuosa con la orientación sexual y la identidad de género de cada una de las personas que la forman", explica Luis Noguerol, responsable de proyectos culturales de la organización.
Diálogo con Las ahijadas
“A través de estos relatos y del material gráfico expuesto, conoceremos un poco mejor los procesos que nos han permitido avanzar hacia la sociedad del arco iris”, añadió Noguerol, y concluye: “Son los primeros treinta años de un cambio que continua vivo, y por ello queremos que la exposición también sea una invitación a la ciudadanía y a las instituciones para seguir sumando pluralidad y sensibilidades.” La muestra se ha realizado gracias al trabajo colaborativo y voluntario de un buen número de personas vinculadas a la asociación y ha contado con el respaldo de diversas instituciones como el Consorci de Museus, el Área de Cultura de la Diputación de Valencia, y los ayuntamientos de Valencia y Burriana.
Esta exposición se vinculará a Las ahijadas, con la que coincidirá durante unos días. Esta muestra es el resultado de la colaboración entre Es Baluard Museu d’Art Modern i Contemporani de Palma y el centro valenciano, un proyecto del creador e investigador británico William James. La propuesta del artista es un trabajo en proceso, que se vehicula en primera instancia en forma de instalación audiovisual basada en una amplia búsqueda documental donde se confrontan dos historias apenas registradas. Testimonios orales y de archivos a partir de los lugares, entre ellos Mallorca y Valencia, que sirvieron de referencia y escenario para el tránsito de dos seres excepcionales y únicos: Natacha Rambova y Natacha Rampova.