Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. Las pantallas de cine se van encendiendo poco a poco. La semana pasada estrenaba la "nueva normalidad" el Autocine Star. Unos días después lo harían algunas salas de Kinepolis Paterna. Esta semana ha hecho lo propio el Cinesa Luxe, ayer MN4 y el viernes será el turno de Ocine Aqua. A excepción de los primeros, todas estas reaperturas han sido de grandes multicines (los únicos que aún no lo ha hecho es Yelmo Cines), mientras los exhibidores independientes de la ciudad de València aún esperarán a final de mes o incluso primera semana de julio.
Los cines en la ciudad volverán a dos velocidades, algo que no estaba previsto de esta manera, porque aunque la ley ya permite en la Fase 2 la apertura de estos espacios, las distribuidoras no pondrán en circulación estrenos hasta el próximo 19 de junio y el primer taquillazo se espera hasta el 17 de julio (Tenet, de Christopher Nolan). La razón de esto es porque el marketing y la comunicación no puede asimétrico en cada territorio, así que las propietarias de las películas quieren esperar a que los cines de toda España (especialmente Madrid y Barcelona) estén operativos.
Estas dos velocidades escalonan la vuelta a los cines pero tienen una razón: muchas de las cadenas que están reabriendo están tomando las salas de València como prueba de los protocolos que aplicarán durante las próximas semanas en los cines de otras grandes ciudades, según ha podido saber este diario. Así, la vuelta está siendo tímida en la mayoría de estos porque tienen en su cartelera reestrenos del 2019 y el 2020 o incluso la reposición de films como Matrix o Los Goonies. Este verano también se prevé que vuelvan a las salas Cinema Paradiso y Apocalypse Now (con un nuevo montaje).
Las políticas de precio ante esta situación están siendo bastante agresivas. Cinesa Luxe ha bajado el precio de su entrada un 50%, mientras que MN4 está vendiendo entradas a un euro.
En el otro lado de la historia, se encuentran los cines independientes, como Lys, Babel o ABC, que si bien están preparando su regreso, no se les espera hasta la última semana de junio o la primera de julio. En los próximos días desvelarán la fecha concreta de su reapertura, algo que esperan con gran entusiasmo. Estos cines, con menos aforo, sí ven importante el impulso de los estrenos para su vuelta a la normalidad, y trabajan por anunciar sus medidas al público para que haya una pronta percepción de la sala de cine como lugar seguro. "Estamos en contacto con las distribuidoras para que nuestra programación sea la mejor para nuestros clientes. Y organizando al equipo y las instalaciones para una buena coordinación ante las medidas de seguridad facilitadas por el Estado", explican desde el Cine Lys. "Estamos reforzando las medidas de seguridad, como por ejemplo, el aire acondicionado, que traerá el 100% del aire del exterior para renovar el ambiente y que este sea más seguro", comentan desde los Babel.
Los dos cines niegan cualquier conflicto o roce con los multicines por adelantarse en la desescalada. Y es que, en realidad, son públicos diferentes, los Lys cuenta con una comunidad muy afianzada -explican sus responsables-, mientras que los Babel tiene un nicho del público ganado y que explota casi en exclusiva en la ciudad. Las salas de las poblaciones que no son València también esperarán unas semanas más.
