VALÈNCIA. La segunda partida más importante de los fondos europeos Next Generation UE es la rehabilitación de edificios, viviendas y la regeneración urbana. Más de 6.800 millones de euros, de los 140.000 millones de euros en transferencias y créditos que recibirá España en el período 2021-2026, irán destinados a la rehabilitación de barrios y a la mejora de la eficiencia energética de los edificios, tanto de viviendas como de oficinas e instituciones públicas, mediante actuaciones para reducir el consumo y la incorporación de energías renovables.
Para entender el porqué de esa cuantía hay que tener presentes unos datos. En España existen alrededor de 25 millones de viviendas (más de 430.000 en la Comunidad Valenciana), de las que el 50% tienen más de 40 años. Además hay un millón de viviendas en estado ruinoso, malo o deficiente, de las que más de 230.000 están en una de las tres provincias de la Comunitat.
A ello se suma que el 75% de los edificios residenciales no son accesibles, por ejemplo un 40% de los edificios residenciales de cuatro o más plantas no tienen ascensor. Según Francisco David Lucas, secretario general de Agenda Urbana y Vivienda del Ministerio de Transportes, existen 9,3 millones viviendas en España que necesitan acometer una rehabilitación. En la Comunitat Valenciana según los datos que maneja la Generalitat uno de cada 4 edificios carece de una accesibilidad adecuada (principalmente falta de ascensor).
En este sentido, a principios de octubre el Consejo de Ministros ha aprobado el Real Decreto-Ley 19/2021, a través del que se adoptan medidas urgentes con el objetivo de impulsar la actividad de rehabilitación edificatoria en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia (PRTR). “La aprobación del RD 19/2021 que introducen nuevas deducciones fiscales en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas por obras de mejora de la eficiencia energética en viviendas y edificios residenciales atraerá sin duda alguna el apetito por la realización de reformas en las viviendas particulares. Las deducciones irán desde un 20% hasta un 40% en las actuaciones en viviendas particulares, y de hasta un 60% en actuaciones que afecten al conjunto del edificio”, comenta José Fuster Andrés, director Fondos Europeos y Sostenibilidad en la Territorial Este de Banco Sabadell.
Por todo ello no es de extrañar que la llegada de los nuevos instrumentos comunitarios de financiación Next Generation EU y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que ha presentado el Gobierno para su aplicación, sean una oportunidad única e histórica para el sector. La rehabilitación de más de un millón de viviendas y la construcción de 20.000 nuevos pisos se estima que supondrá la creación de 188.300 empleos directos (hasta 400.000 nuevos empleos sumados los indirectos), y el crecimiento de 13.500 millones de euros en el PIB.
A ello se suman dos factores más. Por un lado, se producirá un significativo avance en la descarbonización de nuestra economía, se estima una reducción media de consumo de energía primaria no renovable (gas, petróleo) de más del 40% y que se dejarán de emitir 650.000 toneladas de CO2 al año.
Por otro lado, España tiene la oportunidad de ponerse al día con Europa y acercarse a la tasa de vivienda social para alquiler. España padece un importante déficit de vivienda de alquiler social. Frente al 9,3% de Europa, la vivienda social en España representa el 2,5% y concretamente el parque público de vivienda en alquiler en España solo alcanza el 1,6%. Así, en nuestro país los arrendatarios dedican más del 40% de su renta al pago del alquiler (en la UE, ese porcentaje es del 24,2%). Y uno de los objetivos del Plan es aumentar esas cifras.
Pero, no solo pymes y empresas del sector de la construcción tienen esa oportunidad, también las distintas administraciones públicas locales a las que los fondos Next Generation y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia exigen que elaboren proyectos piloto de referencia para avanzar en la Agenda Urbana Española, un documento estratégico que busca la sostenibilidad en todas las políticas de desarrollo urbano, para dar forma a un urbanismo del futuro, respetuoso y centrado en las personas.
Las ayudas, que se darán entre 2021 y 2023 en forma de subvenciones a fondos perdido y de créditos reembolsables, están repartidas en seis programas: rehabilitación para la recuperación económica y social en entornos residenciales; construcción de viviendas en alquiler social en edificios energéticamente eficientes; rehabilitación energética de edificios; regeneración y reto demográfico; impulso a la rehabilitación de edificios públicos; y elaboración de proyectos piloto de planes de acción local de la Agenda Urbana Española. Podrán optar a ellas grandes empresas, pymes, propietarios de inmuebles y comunidades de propietarios.
Este servicio ofrece también planes de ayuda y asesoramiento a lo largo del proceso de definición del proyecto y anticipa financiación para aquellos que pueden ser elegidos y la complementa. Asimismo, la entidad emite avales que aseguren la cobertura financiera de las iniciativas. “Hemos elaborado una oferta donde se destaca nuestro acompañamiento en todo el proceso de estudio, financiación y tramitación de los proyectos de rehabilitación de viviendas, poniendo en valor nuestra oferta específica de financiación (con la novedad de ampliación de plazo hasta 10 años), protección y de cuenta a la vista para Comunidades de Propietarios”, explica el director Fondos Europeos y Sostenibilidad en la Territorial Este de Banco Sabadell.
Asimismo, Banco Sabadell, a través de su proyecto Hub Empresa, ha organizado el próximo 18 de octubre un webinar sobre ‘Fondos NGEU y eficiencia energética: una oportunidad para la rehabilitación de viviendas’, con expertos para informar en detalle de los programas que conforman el Plan y que está abierto a todos los interesados.