Los gánsteres también bailan: 'Casa nostra' llega a La Mutant

VALÈNCIA. La compañía Si los martes fueran viernes (SLMFV) presenta este sábado, 28 de octubre, en La Mutant, un trabajo escénico basado en el estudio del género cinematográfico de la mafia. Esta exploración de los códigos del cine protagonizado por gánsteres será el marco para generar un dispositivo que permita desarrollar una pieza de composición instantánea.

La propuesta lleva por título Casa nostra y propone la creación en vivo a partir de todas las variables de la escena: los cuerpos y sus danzas, el sonido, las luces y el vestuario. Las argentinas Milagros García y Valentina Azzati son las responsables de la idea y la dirección de esta propuesta.

“La composición instantánea es para nosotras una destreza, tan necesaria de aprender como las matemáticas, la química o la historia. Y la improvisación escénica es un campo de trabajo tan específico y técnico como cualquier otro. Es una práctica reflexiva que incluso podría utilizarse como material de estudio sociológico y antropológico. Improvisar es el acto y el estudio del estar siendo presente. Componer instantáneamente conlleva la intención de crear algo en ese tiempo presente. De bailar, no “a tiempo”, sino en el tiempo presente”, desarrollan su especialización desde el colectivo.

La compañía sube al escenario sin guion, coreografía ni ensayo previo, lo que, en sus propias palabras, “supone una responsabilidad inusual para el actor o el bailarín: la de su propia emancipación creativa”. De resultas, componer una pieza desde este paradigma implica para sus participantes, los bailarines Julia Irango, Guillem Jiménez, Kiko Lopez, Claudia Solwat, Nicolás Carbajal y Ruth Pri, “un acto de entrega, de escucha, de voluntad y de valentía”.

SLMFV es un espacio de creación y producción de piezas escénicas de composición instantánea. Desde 2018 trabajan en Barcelona con el objetivo de generar un espacio sobre el estudio y la práctica de la improvisación. En sus producciones han participado más de 130 artistas estatales e internacionales y han colaborado en la capital condal con La Caldera, el Graner, La Lleailtat Santsenca, Nau Bostik, Pla Roig, Akasha Hub y en Buenos Aires con Galpon de Guevara, Dumont 4040 y Espacio Roseti.

“La composición instantánea es el único territorio en donde el performer y el público saben realmente lo mismo acerca de lo que está a punto de acontecer: nada. Es por eso que no hay otra opción, como compositores e improvisadores, que hacernos expertos de y en el tiempo presente. No se improvisa “con los ojos cerrados”, se improvisa mirando el mundo que estámos viviendo y del que somos, conscientes o no, interventores y creadores”, concluyen desde el colectivo.