VALÈNCIA. Cuando Convent Carmen abrió sus puertas en València pocos podían imaginar su final prematuro. Pero así fue. Poco antes de que se decretara la pandemia el espacio cerró sus puertas. “Cuando el Ayuntamiento de València decretó el cierre administrativo de Convent Carmen el 4 de marzo de 2020 siempre pensamos que se trataba de un paréntesis […] El equipo que ha permanecido trabajando en silencio durante más de dos años”, explican sus impulsores. Y efectivamente ha sido una suerte de paréntesis, aunque no del todo. Convent Carmen no vuelve, de momento, pero sí lo hace su espíritu en una nueva ubicación y bajo una nueva marca: Villa Indiano.
Villa Indiano abrirá sus puertas el próximo 2 de junio, un espacio que, como su predecesor, contará con restaurante, jardín gastronómico de casi 2.500 metros cuadrados con programación sociocultural y espacio para eventos, un proyecto centrado en el ocio diurno con enfoque familiar. Villa Indiano, una edificación erigida hace más de un siglo como residencia de verano, se ubica en plena huerta, pero cosida al mismo tiempo al centro urbano de Burjassot, frente a su estación de metro. En ella destaca una escalera monumental que da la bienvenida y, ya en su interior, azulejería original con motivos vegetales, detalles ornamentales en sus techos, un sistema de ventilación de época o vidrieras esmeriladas en sus carpinterías. El proyecto de adecuación ha sido llevado a cabo por la arquitecta Sindy Charry y Clap Studio
El jardín cultural del espacio estará destinado al esparcimiento, a la generación de arraigo y comunidad, poseerá su propia oferta gastronómica y también habrá cabida para toda clase de eventos corporativos y sociales.La programación sociocultural que acompañará al jardín se estructurará en torno a ejes temáticos, tratando de ser “un altavoz de iniciativas para públicos diversos y promoverá la curiosidad, la tolerancia y la cordialidad”. A esta oferta más informal se suma la de restaurante que busca “sublimar la cocina tradicional valenciana y proseguir así la línea de trabajo iniciada en Alma del Temple, otro de nuestros proyectos”.
Los promotores del espacio ven "arbitraria" la decisión y advierten de la inseguridad jurídica en València. "Hay miles de proyectos parados en la ciudad. Ya avisamos a los futuros inversores de que no vengan", aseguran.