VALENCIA, (EFE). La Confederación de AMPAS Gonzalo Anaya se une a la iniciativa de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres del alumnado, CEAPA, de que los alumnos no hagan deberes en casa durante los fines de semana del mes de noviembre para "plantear un nuevo modelo educativo".
Según la confederación, el objetivo es "hacer un replantanteamiento de las tareas escolares" que tenga en cuenta factores que también intervienen en la educación como "los agentes sociales que forman parte del entorno del alumno". "Además de formar a nuestros hijos e hijas en conocimiento es necesario trabajar también en valores, en habilidades sociales, en definitiva, en formar personas", ha considerado el presidente, Màrius Fullana.
La propuesta pasa por que los escolares no realicen deberes durante los fines de semana del mes de noviembre, es decir, que cambien las actividades académicas por otras familiares. Con ello se intenta conseguir que los niños "disfruten esos días del juego, de actividades artísticas y culturales, tal y como reconoce el artículo 31 de la Convención de los Derechos Humanos", según han indicado desde la Confederación de AMPAS.
Esta iniciativa también recoge "los derechos de los padres y madres a tomar decisiones" sobre el ámbito familiar, que, recuerdan desde la Gonzalo Anaya, "es donde se traslada la actividad académica de los deberes durante el fin de semana". Para unirse a la iniciativa de CEAPA, la confederación ha establecido que las AMPA interesadas deben comunicar al tutor, así como al Consejo Escolar, su intención de unirse a esta iniciativa.
Desde Gonzalo Anaya han subrayado las desigualdades que los deberes pueden generar entre los escolares, puesto que "al realizarse fuera del aula intervienen otros factores ajenos al alumno, como el nivel de conocimiento de los padres o la disponibilidad de los mismos para facilitarle la tarea a sus hijos".
Asimismo, han reivindicado la defensa del derecho de los niños a jugar y a tener tiempo libre, y han defendido otro modelo pedagógico que "no se base tanto en la memorización y la repetición de los contenidos" y que evite sobrecargar a los alumnos con tareas escolares para evitar que los deberes intercedan en el tiempo dedicado al ocio y la familia.