EL VERGER. El cierre de la factoría de Bimbo en El Verger está decidido y se efectuará el 31 de marzo, pese a la manifestación que organizaron los empleados y contó con más de mil participantes y las dos jornadas de huelga de esta semana, que fueron lunes y martes. Los trabajadores tienen asumido ya que la empresa tiene la decisión tomada y que no tiene intención de invertir ni un sólo euro en la fábrica con el fin de mantenerla, todo ello teniendo en cuenta que es un recinto rentable y que las dos líneas de producción con las que cuenta no suponen pérdida alguna.
Pero la firma quiere trasladar esta producción a otras plantas. Santa Perpetua en Cataluña es la elegida, después de que allí sí que se haya invertido con el fin de que se pueda asumir más producción. Ante esta situación, el Comité de Empresa, que cuenta con el aval de todos los empleados para negociar, ha mantenido varias reuniones con los representantes de la empresa y de momento,
La mercantil sólo ofrece 33 días por año trabajado como indemnización para los empleados que cesen en su actividad y declinen un empleo en otras de su plantas: Puente Genil, Paterna o Santa Perpetua. Pero ante esta situación, miembros del Comité de Empresa han viajado esta semana, tras los días de huelga por varios puntos de España para reunirse con miembros de otros comités y empleados de otras fábricas.
El objetivo no ha sido otro que informarles al detalle de cómo se está desarrollando el proceso en El Verger y la negativa de Bimbo a hacer algo por mantener algunos puestos de trabajo en la Marina Alta. Fuentes del Comité de Empresa han explicado este viernes 2 de febrero que la “decisión está tomada y poco se puede hacer para que la planta siga abierta", pero “sí se puede luchar para que los empleados que pierdan su trabajo lo hagan con las mejores condiciones”.
“Estos ha llegado sin avisar, no pueden avisar que cierran con un mes de antelación y dejar a más de cien personas en la calle en la Marina Alta, donde muchos hogares dependen de esta fábrica y por la que han pasado varias generaciones de una misma familia”, han precisado. Por este motivo, cuando los miembros del Comité de Empresa aterricen en El Verger, después de pasar por puntos de España como Almería o Madrid, informarán de todo a los empleados.
Pese a que la situación es irreversible “hay margen” para luchar por mejorar sus indemnizaciones y eso es lo que van a hacer. “No descartamos más manifestaciones como la del sábado pasado, donde participaron más de mil personas y acudieron empleados de otras factorías. Además, habrá más jornadas de huelga y de cese de la producción hasta que la empresa asuma nuestra exigencia para cesar la actividad.
La petición no es otra que obtener una indemnización acorde con los años de dedicación del centenar de empleados El Verger. “No podemos conformarnos ni con 25 días, ni con 33; Bimbo tiene que pagaron 45 días por año trabajado, esa es la única forma de llegar a un acuerdo”. Pero no acaban sus exigencias, el Comité de Empresa quiere que se les abonen cantidades en función de la normativa de 2012, antes de que se cambiara y se rebajaran los días por año trabajado y el tope total de anualidades a cobrar.
Los empleados quieren, además de 45 días, que se les pague hasta un total de 42 meses, en lugar de 12 como dice la normativa actual o dos años, como ha ofrecido la empresa. 42 meses supone un total de tres años y medio. “Todo esto como mínimo”, han precisado. Lo que de momento sigue en pie son las jornadas de huelga previstas para la próxima semana, para el lunes y martes, 5 y 6 de febrero”. En cualquier caso entre este viernes y sábado, habrá reuniones o una asamblea de empleados para ver si estas reclamaciones son suficientes o se exigen más, al igual que si se plantean más jornadas de paro en la fábrica.