CASTELLÓ. Asegura el secretario autonómico de Cultura, Ximo López, que la exposición que podrá verse desde este sábado en el Espai d'Art Contemporani de Castelló (EACC) es "una de las actividades más relevantes que Generalitat ha organizado en el contexto de celebración del Any Joan Fuster". Una muestra elaborada, mayoritariamente, por creadores y creadoras locales, en la que, sin embargo, no hay obra específica del célebre escritor. Aunque podría pensarse que sí, puesto que sirve como homenaje al valenciano, ha sido más bien su ensayo El descrèdit de la realitat el que ha dado nombre y ha servido de inspiración para el trabajo que podrá verse en el ente hasta el 18 de septiembre. Un proyecto que, además, pone 'patas arriba' el interior del centro cultural.
Todos, o casi todos, los materiales que componen la exposición, han sido cogidos de los almacenes del EACC con el fin de darles un nuevo uso. Desde televisores, carteles y telas, hasta los azulejos de mármol que caen de las paredes exteriores del edificio han sido reutilizados. Un ejercicio de deconstrucción del espacio que conecta en cierta manera con el espíritu crítico del pensador. "Cuando Fuster publica este libro en el año 1955 reflexiona alrededor de la historia de la pintura, pero también de los cambios sociales que iban surgiendo y que influyeron en la manera de entender el arte. Su relectura en la actualidad nos ha llevado a pensar en esos descréditos que hay ahora, pero también nos ha empujado a repensar el interior del EACC", señala Paula Lorenzo, comisaría de la muestra.
En este sentido, y como apunta el director del EACC Carles Àngel Saurí, la muestra lo que ha buscado es "hacer una mirada crítica a la institución y a los procesos de producción artística". "En la exposición se han involucrado una serie de personas, la mayoría de participantes son de las comarcas de Castellón, para pensar colectivamente qué es el EACC y hacerlo utilizando restos de anteriores exposiciones para reflexionar, a la vez, sobre la sostenibilidad de las obras", añade el coordinador de la muestra.
Esto ha sido posible, además, porque la mayoría de los artistas que exponen se sienten parte de un momento de inflexión y de un futuro incierto. De un periodo en el que hace falta encontrar alternativas a un modelo de cultura y producción artística que está "en crisis". No obstante, cada uno de los invitados tenía la posibilidad de elegir dos caminos: o bien ceder una obra que influyera en el espacio expositivo o participar en un proceso de descrédito del EACC.
"En Castelló podrá verse una exposición innovadora y arriesgada", sentenciaba López, quien en la presentación a la prensa este jueves, estuvo acompañado por el comisario del Any Joan Fuster, Francesc Pérez Moragón, el director general del Institut Valencià de Cultura, Abel Guarinos, y el delegado territorial del IVC en Castellón, Alfonso Ribes.
Por su parte, los impulsores de esta 'revolución' son: Álex Marco, Blanca Arias, Carlos Bonet, Carlos Páramo, Gema Quiles, Guillermo Ros, Jorge Julve, Lara Ordóñez, Leomi Sadler Lu Rose Biltucci, Malaerba y Maria Doménech. Creadores y asociaciones, cuyos trabajos no comparten ni forma ni contenido."No se buscaba una relación temática, ni discursiva, ni de lenguaje, ni siquiera el aura o la autonomía moderna de las obras. Esta exposición tenía que ser un descrédito en sí que permitiera incluir una serie de gestos, voces y afectos con los que curar y dar nueva vida al Espai".
Por citar algunos trabajos, en su caso Blanca Arias decidió acercarse al descrédito desde el cariño y no desde el juicio. En su instalación puede verse un conjunto de cartas que la artista ha escrito a las personas que trabajan en la construcción de una exposición. De alguna manera, con esto "desacredita" lo que puede entenderse por una exposición. No solo tras ella están los artistas, sino un equipo de trabajo mucho más amplío que casi siempre queda en un segundo plano. Por su parte, Maria Doménech decidió utilizar los carteles y papeles que el ente ha utilizado para anunciar sus muestras. La creadora, los toma y los tritura convirtiéndolos en una nueva obra donde las narrativas también cambian. Y un trabajo totalmente distinto es también el de Leomi que con sus viñetas y cómics reflexiona y desacredita las diferencias formas de "deshumanización" que existen en el mundo empresarial y corporativo neoniberales hacia los trabajadores y trabajadoras.
Son muchas las reflexiones que esconde El descrèdit de la realidad. En efecto, no es una muestra sencilla de entender a primera vista. La exposición sitúa al espectador en un lugar de contemplación para el que se requiere mucho tiempo y predisposición. Solo así, podrá entender el mensaje que ha querido transmitir cada creador.
Con todo, por lo que hace a Joan Fuster, el guiño a su figura no acabará aquí. El EACC ha preparado además una serie de actividades paralelas que invitan a profundizar en el descrédito con intervenciones de artistas y jornadas específicas alrededor de la arquitectura o las artes y los pensamientos escénicos, además de intervenciones musicales y teatrales.
Será el sábado 2 de julio cuando las actividades paralelas arranquen con la jornada de pensamiento arquitectónico titulada 'Rotondas y naranjos', que propone reflexionar sobre la arquitectura y el paisaje contemporáneo de Castelló, para analizar varios imaginarios colectivos que sobrevuelan la ciudad. Una jornada en la cual participarán el director de cine Chema García Ibarra, las fotógrafas Manuela Lorente y Erika Achec, y la diseñadora y docente Pau Orts.
Además, en julio y septiembre habrá visitas comentadas a la exposición y, entre las diferentes actividades complementarias, el 10 de septiembre el comisario del Any Joan Fuster, Francesc Pérez Moragón, y la galerista y creadora de Castelló, Pilar Dolz, mantendrán una conversación en torno al texto fusteriano que da nombre a la exposición.