Foto: EVA MÁÑEZVALENCIA. A nadie en el mundo político y económico valenciano se le escapa que la secretaria autonómica de Economía, María José Mira, no encaja en una Conselleria controlada por Compromís en la que la número dos, ella, apenas se habla con el número uno, Rafael Climent, y con algunos directores generales en teoría, sólo en teoría, subordinados.
Tanto es así, que unos y otros dan vueltas desde hace días a la posibilidad de buscar otro puesto para Mira, quien fue de cabeza de lista del PSPV por Valencia en las autonómicas de hace un año, aunque ella es independiente.
Uno de los globos sonda lanzados por los socialistas es el puesto vacante que deja Rafael Vicente Queralt en la Sindicatura de Comptes. El Síndic Major no repetirá -su mandato expiró el 19 de mayo, aunque sigue si se nombra sustituto pronto, y los grupos parlamentarios en Les Corts, excepto Podemos, tiene bastante clara la continuidad de los otros dos síndicos, Marcela Miró y Antonio Mira-Perceval.
Varios parlamentarios de distintos grupos han confirmado a Valencia Plaza que el nombre de María José Mira ha sido planteado informalmente por los socialistas, a ver que tal caía. Y la verdad es que no ha caído tal mal como cabría suponer viniendo de un cargo público y habiendo sido cabeza de lista hace un año.
A Compromís y a Ximo Puig -su mayor apoyo en el Consell- les quitaría un problema y en Ciudadanos está bien valorada por su buena relación con Alexis Marí. El mayor obstáculo sería Podemos, ya que Montiel no quiere a expolíticos en el órgano de control de las cuentas.
¿Y Climent? ¿Qué diría el conseller de Economía si el precio de quitarse de encima a su compañera y sin embargo enemiga fuera que pasase a fiscalizar las cuentas de la Generalitat y, por tanto, de la Conselleria?
