Hoy es 4 de octubre
GRUPO PLAZA

champagne y música

Maridajes inesperados o cómo la terrina de conejo se ligó a la Viuda de Clicquot

22/12/2018 - 

VALÈNCIA. Con el fum, fum, fum, el turrón del Almendro y el vestido de la Pedroche pisándonos los talones, ya va siendo hora de decidir qué ponemos de beber sobre el mantel rojo en nochebuena. Y viene en nuestra ayuda el champán Veuve Clicquot. Esta histórica maison debe su nombre a Barbe-Nicole Ponsardin, viuda de Clicquot, una pionera e innovadora mujer que heredó el negocio local de vinos espumosos de su marido y lo convirtió en un imperio mundial. La dama del champán legó para la historia una excelente bebida espumosa con una icónica etiqueta amarilla, como los rayos del sol, que nos anima y acompaña en momentos memorables. 

La historia de la etiqueta amarilla Veuve Clicquot nos la contó el enólogo Xavier Monclús durante la cata organizada por Javier Monedero, de Dicoval, en el renovado Café Madrid. Cuando comparto mesa con un hombre como Xavier Monclús soy más feliz. Es lo que los franceses llaman un connoisseur en el arte de vivir. Le gusta comer y le gusta beber. Como todo buen saboreador de la vida nos proporcionó consejos muy útiles, como beber champán en copas especiales de la marca Riedel, no abrir una botella apuntando al ojo de tu cuñado con el corcho y atreverse con nuevos maridajes. 

Foto: KIKE TABERNER.

Eso de que el vino blanco se sirve con el pescado, el tinto con la carne y el champán para brindar es de los tiempos viejunos en que solo había dos canales en la televisión. Una verdad sobre la que se ha cimentado el siglo XX que se desmorona sin remedio. Las nuevas generaciones de someliers llegan sin prejuicios, decididos a romper con lo establecido. 

Como tampoco teme a lo establecido Nacho Romero, el chef de Kaymus y del nuevo Café Madrid, que preparó un osado menú para maridar con el champán de Veuve Clicquot. Unos dim-sum de langostinos y ostras para entrar en materia. Después, terrina de conejo con castañas para acompañar un soberbio Veuve Clicquot Vintage. Nada como las burbujas para ayudarnos a limpiar la boca de esa explosión de sabor. Y dejen paso a esa maravillosa botella de Vintage Rosé con la brocheta de lubina salvaje. Llega un momento en la edad adulta en que una aprende que hay vida más allá del albariño. El fin de fiesta fue una pierna de cabrito con la Gran Dame Rose, cosecha especial de Veuve Clicquot, un vino catedralicio. 

Un espacio singular, cena especial, invitados de lujo... como era de esperar en la sala se colgó el no hay billetes ni sitio para nadie más. Era la última convocatoria antes de las fiestas navideñas y el champán logró sacar de sus cuarteles de invierno a gente desaparecida del mundanal ruido: el gastrónomo José Luis Palencia, el restaurador Abraham Romero con su mujer, el empresario David González, el propietario de Bodegas Hispano Suizas y director de Murviedro, Marc Grin, acompañado de su mujer, o el odontólogo Luis Felipe Lloret. También asistieron Regina García de Casas del Mediterráneo, Luis Martínez, Carmen Pérez Romero, la periodista Begoña Clérigues, Vicente Aguilar, la empresaria Susana Pardo, Maite de Barbados, Gabriel Hinarejos y el empresario hotelero Óscar Nácher, que me anuncia un nuevo gran proyecto para el mes de marzo. Estaremos atentos.

El concierto de Nacha Pop anima la fiesta navideña del club Moddos

El club empresarial Moddos celebró su tradicional fiesta de navidad por todo lo alto. Normalmente, reniego de las tradiciones sin ninguna crispación (¿pero quién es ese sujeto con barba postiza y residente en Laponia que dice que vendrá a mi casa el día 24?), pero el festorro que preparaban lo merecía. Por el lugar elegido (Masía Aldamar), por las sorpresas preparadas (mi amiga Carmen Alcayde y su divertido monólogo) y por el concierto de Nacha Pop (con nostalgia de la Movida madrileña).

La noche de la fiesta se vieron líricas bigardas, apellidos conocidos y un Audi Q7 en la entrada. Como era una noche en la que hacía más frío que en Siberia, entre las féminas predominaron los  abrigos peludos, tacones altos y el clásico vestido negro que es el equivalente al ibuprofeno en el botiquín, a la VISA en el monedero, al jamón serrano en la despensa: imprescindible.  

Ejercieron de anfitriones el presidente del Club, Josep Lozano, y el director de expansión, Miguel de Vicente, que fueron los encagardos de presentar el monólogo de Carmen Alcayde durante la cena servida por Grupo El Alto. Después llegó el sorteo de regalos cedidos por las empresas del Club (Dormitienda, Óptica Climent, The Westin Valencia, Teatro Olympia, Alfredo Esteve, Crämm, Jarr, Aurora Reig, Dicoval y Sie7e Jewels Gallery) y el inicio de la parte más divertida de la noche con el concierto del mítico grupo Nacha Pop. Regreso al pasado. Volvemos a los cigarrillos de liar, a hacer la compra con carrito, a celebrar los cumpleaños de los niños en casa (el comedor se te queda como si hubiera ido Atila a merendar) y a ver películas mudas en el cine. Hasta las Spice Girls dicen que nos deben una gira. A mí, la verdad, no me deben nada

Hacia la mitad del concierto el personal se alborotó. Nacho García Vega nos animó a cantar su famoso tema «Vístete». Llegas tarde, colega, ya lo hacíamos sin invitación. Bravos, aplausos y «vístete, aguantaré, vístete, te sigo esperando» del estribillo berreado por todos. «Otra canción», grita la señora de mi lado. Venga, pues otra. Entonces atacaron «Grité una noche» y el ooooooh fue de traca. A esas alturas yo estaba convencida de que vivo en los años 80, en plena movida madrileña, llevo el pelo cardado y la sombra de ojos azul. Y me desgañito. «Grité una noche como hoy por la noche, otro golpe, recordar el instante en que te vas.» Que no se me olvide añadir que los supervivientes del concierto fuimos recompensados con una sesión de música con vinilos del Dj David Phillips. 

Entre los asistentes a la fiesta, empresarios como David Lladró y Marta Aliño, Lluis Lluch, Luis fernández de Córdova, Pablo Rodríguez,  Enrique Duart y Maria José García, los hermanos Fernando, Isa y Nacho Aliño. También gente del mundo de la moda y el diseño como Alejandro Resta, Alfredo Esteve, los joyeros Guillermo Martorell y Mamen  Puchades, Marcelo Soto y María Dolores Enguix, los interioristas Verónica Montijano, Mateo Climent y Reme Hidalgo. Del mundo de la comunicación estuvieron Carolina Ferré, Ferrán Cano, Laura Grande, Alex Villar, Lluis Nadal y José Morales, Inés Tordera, Iñaki Verschraege y Leonor Ariño, Silvia Kelle, Manuel Navarro y el equipo de la revista Oxxo Wedding con Carola Alegría, Mavi Sales, Daqui Gómez y Sandra Zomeño. No faltaron los odontólogos  Lucía Asensio Romero y Jose Luis Lanuza Guillem, la doctora Aurora Reig y los abogados Javier Edo y Pablo Aguirre. 

 

Entre los asistentes también hubo nombres bien conocidos como Laura Fitera, Julia Rico, Fermín García y Anna de Blas, Jose Dolera, Cristina Pérez Broseta y Julia Pérez Broseta, Javier Monedero, Sonia Gómez Luzón, Nacho Sanchís y Silvia Zarza, Begoña Albert, Rosa Buraglia, Javier Soria, Agustín Buraglia y Asela Santolaya,  Santiago Castell, Fernando e Ignacio Aliño, Lluis Llopis, Laurence Lemoine, Aline Mataix, M. Ángeles Varvaró, Lorena Irurzun, Cristobal Veyrat, , Alejandra Domingo, Iñaki Sevillano, Miguel Garín, Jose Vicente Huerta,  Inmaculada Sobrino, Paz  Olmos, José Soto Fernández, Enrique Senís,  Víctor  García, Gloria Pons, Kiera Khan, Brandon Khan, Mercedes Berenguer, Eva Gadea, Nicola Seyda y Caroline Trowbridge.

El nuevo altavoz de Bang & Olufsen y los micronichos de mercado

Ay, esos extraños nichos de mercado. Qué aburrido sería el consumo sin ellos. Los amantes de los micronichos vivimos un momento dulce: florecen los productos imprevisibles. En general las microaudiencias somos muy agradecidas. Un ejemplo es el nuevo altavoz BeoSound Edge de Bang & Olufsen que presentaron en su showroom de València. Tiene un sistema multiroom que consiste en combinar distintos altavoces inalámbricos en el hogar para poder sentir la música en todas las habitaciones. 

Los maestros de ceremonias fueron los influencers Daqui Gómez y Mavi Sales que mostraron a los invitados el funcionamiento del multiroom de Bang & Olufsen. Una delicia de máquina con forma de círculo perfecto controlable de forma táctil. Puro diseño con mucho gusto. Porque sobre gustos sí que hay mucho escrito. Y si no, lo escribo yo.

Noticias relacionadas

next

Conecta con nosotros

Valencia Plaza, desde cualquier medio

Suscríbete al boletín VP

Todos los días a primera hora en tu email


Quiero suscribirme

Acceso accionistas

 


Accionistas