A la espera de decidir el futuro de Marie Claire: su facturación rondaría los 15 millones
A la espera de decidir el futuro de Marie Claire: su facturación rondaría los 15 millones
CASTELLÓ. Marie Claire entra en el tiempo de descuento. A la centenaria textil se le acaba el plazo para lograr la continuidad de una parte de su actividad de confección de medias y la manipulación logística en Vilafranca. La quinta sesión negociadora entre el comité de empresa y la dirección de la compañía acabó este miércoles sin acuerdo para firmar las condiciones del Expediente de Regulación de Empleo que permita a la firma reducir su plantilla hasta el tamaño necesario para la actividad futura.
Alrededor de unos 80 trabajadores, reunidos en asamblea, votaron en contra de firmar una "carta blanca" para proceder a los despidos, señalan fuentes sindicales. Tras la negativa durante la tarde, las negociaciones continuaron en busca de alguna mejora que aporte "garantías" a quienes, sí o sí, dejarán la firma a finales de mes, apuntan desde el comité de empresa.
Y es que, aunque hasta ahora la negociación se ha centrado en definir la plantilla que sería necesaria para continuar con la actividad, ahora los representantes de los trabajadores pretenden lograr una mejora sobre el mínimo legal del despido, fijado en 20 días y 12 mensualidades. Esto choca frontalmente con lo que puede aportar el Fondo de Garantía Salarial y, de hecho, tiene un encaje legal muy complicado con la financiación que el Fogasa puede abonar para pagar las indemnizaciones.
A la espera de decidir el futuro de Marie Claire: su facturación rondaría los 15 millones
De ahí que, tras el receso para la asamblea, en la noche de este miércoles tampoco se alcanzase el acuerdo, aunque se produjo cierto avance, indican fuentes conocedoras. Eso sí, tras la cita no se fijó ninguna reunión para continuar con la negociación, aunque se espera una comunicación de la empresa en breve para retomarla.
Así las cosas, por el momento no se da el acuerdo entre el comité y la dirección, el primer requisito inexcusable para que una parte de la plantilla de Marie Claire pueda seguir trabajando el 1 de julio, cuando ya se ha de haber aplicado el ERE, dado que es la fecha para que los 130 trabajadores en ERTE se reincorporen a sus puestos, y esto es inviable.
El segundo requisito es el acuerdo con el Fogasa y la negociación no parece que avance hacia buen puerto en esta cuestión. Pero, por el momento, los trabajadores no quieren desligarse de la compañía, ya que temen que sus administradores puedan continuar haciendo negocio con la marca, sin apenas actividad en España (solo con la comercial y la logística) y ellos haber perdido la posibilidad de mejorar sus condiciones de salida. De ahí que vean en el concurso de acreedores que la firma ya ha prerregistrado en el Juzgado de lo Mercantil nº1 de Castellón una opción para tratar de seguir negociando. Pero fuentes cercanas a la dirección siempre han trasladado que este concurso derivaría únicamente en la extinción de la firma.
Además, y respecto al crédito que debería aportar el Fogasa para financiar las indemnizaciones pese a que la firma continuase activa, desde los sindicatos aseguran que, en una carta, la entidad pública apunta que no hay inmuebles ni maquinaria que puedan servir para avalar la operación. De todas formas, Marie Claire debería abordar este punto con la institución pública la semana próxima.
Con todo ello, el tiempo se le echa encima a los dirigentes de Marie Claire. Eso sí, la negociación sigue abierta y, aunque la operación es compleja, se continúa trabajando para tratar de mantener abierta la ventana de una pequeña actividad fabril y logística en Els Ports.