El presidente del BCE compareció ayer ante el Parlamento Europeo donde reconoció que la 'desconexión' del Reino Unido de la Unión Europea será "bastante tenue"
BRUSELAS (EP). El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha asegurado en el Parlamento Europeo que el impacto de la salida de Reino Unido del bloque comunitario tendrá un impacto "bastante tenue", también en el sector financiero, aunque ha apuntado al negocio de compensación de derivados en el caso de un Brexit 'duro'.
"Por lo general, nuestras estimaciones muestran que, en el campo real de la negociación, el impacto debería ser, en términos agregados, bastante tenue. En el campo financiero, el impacto que esperamos no debe ser significativo", ha expresado durante su comparecencia ante la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo.
"Con una excepción: en algunas áreas de la compensación central de derivados, en las que en caso de un evento repentino, un Brexit 'duro' sin preparación del tipo más duro, tenemos que ver cómo se van a regular las muchas posiciones contractuales", ha advertido el banquero italiano.
Draghi ha garantizado que el BCE "sigue supervisando" los "acontecimientos" de las negociaciones entre Bruselas y Londres, pero ha insistido en varias ocasiones que la institución que preside no forma parte de las mismas.
"Tenemos que ver cuál es el resultado final de las negociaciones antes de que podamos ver cuál es el siguiente paso. Claramente deseamos que cualquier solución no comprometa la integridad del mercado único", ha expresado el presidente del BCE, quien ha destacado que la colaboración en este asunto con el Banco de Inglaterra es "buena".
Sin embargo, Draghi ha puntualizado que cuando habla de que el impacto "no será o al menos no parece que será importante" está hablando "para toda la eurozona", pero ha reconocido que algunos Estados miembros -especialmente Irlanda- pueden estar "significativamente expuestos" a las consecuencias de un Brexit duro. En cualquier caso, ha afirmado que es "bastante improbable" la Unión Europea deje "sola" a Irlanda ante un escenario así porque los valores del club europeo "incluyen la solidaridad".