Este programa de ayudas desarrollado por la sección de Ciudades Inteligentes de la Diputación destina este año 2,5 millones de euros a la implantación de 155 programas presentados por ayuntamientos, mancomunidades y entidades locales menores, que han tenido plena autonomía para decidir el destino de las actuaciones en función de sus necesidades, ha detallado la corporación provincial en un comunicado.
Cada proyecto recibirá un máximo de 20.000 euros para subvencionar el 80% del importe total. En este sentido, el 42 por ciento de los proyectos aprobados se refieren a asuntos relacionados con la movilidad y el tráfico, siendo este el objetivo mayoritario de las peticiones de las diferentes entidades.
La gestión del agua y de la energía, con un 21% y 19% de los proyectos, son otros campos donde los ayuntamientos han centrado sus objetivos a la hora de apostar por las 'smart cities', como también lo son la calidad del aire, el ruido, la prevención de incendios y la gestión de residuos.
El diputado de Administración Electrónica e Innovación, Juan Ramón Adsuara, ha señalado que esta línea de ayudas "permite romper la brecha que hasta hace muy poco tiempo solo permitía a los grandes ayuntamientos disponer de una plataforma smart para poder explotar los datos de una ciudad inteligente".
En este sentido, ha incidido en que para conseguir "realmente un territorio smart son las propias entidades locales las que tienen que tener la iniciativa, algo que en ocasiones se complica por falta de recursos económicos". "Por ello, la nueva corporación de la Diputación redoblará esfuerzos para dar soporte a esta línea de subvenciones", ha resaltado.
Una de las "claves" de las subvenciones de la institución provincial en materia de 'smart cities' es que los municipios beneficiarios vuelcan toda la información recogida en la plataforma Smart que la Diputación pone a disposición de todos los ayuntamientos de manera gratuita a modo Cloud con código abierto, y a la que cada entidad puede acceder de forma totalmente individualizada y personalizada.
De esta manera, se logra un "doble objetivo". Por un lado, todos los ayuntamientos pueden conocer el abanico de aplicaciones prácticas de las herramientas smart, visualizando las experiencias que ya están en marcha. Por otro, los consistorios pueden optimizar la aplicación práctica de los datos que obtienen con su propia tecnología gracias a los servicios que ofrece la plataforma provincial.
Asimismo, el hecho de centralizar la gestión de datos en la Diputación permite "analizar y comparar la información", así como estudiar "la eficiencia de un mismo servicio entre todos los municipios".
De esta manera, se pueden "trazar mejor las estrategias globales para avanzar en los objetivos de modernización de los municipios replicando buenas prácticas, consiguiendo mejores servicios, mejorando el coste, la sostenibilidad y, sobre todo, la orientación al ciudadano", ha concluido Adsuara.