Foto: RAQUEL ABULAILAVALÈNCIA (EP). Más de 300 personas mayores del departamento de Salud Valencia-Hospital General han participado en la 'V Trobada de la gent major' que visibiliza el proyecto Activa a través de una marcha por el cauce del río Turia, con el objetivo de fomentar el ejercicio físico, los hábitos de vida saludables y animar a los mayores a que abandonen la vida sedentaria.
La marcha, de cuatro kilómetros, ha partido del Hospital General y ha finalizado en la sede central de la Diputación de Valencia, en la plaza Manises, donde han sido recibidos por el presidente de la Diputación, Vicent Mompó, y la diputada de Bienestar e Inclusión Social y Salud Pública, Imma González, según ha informado la institución provincial en un comunicado.
El presidente de la corporación y la responsable del área de Bienestar Social han felicitado a los participantes por su "compromiso por mantenerse activos" y han dado la enhorabuena por esta iniciativa que tiene "tantos beneficios para las personas mayores". Asimismo, han animado a los participantes a seguir realizando ejercicio físico para "mantenerse bien y mejorar la salud".
Este encuentro se enmarca en el Proyecto Activa, que evalúa la repercusión del ejercicio físico sobre el control de las patologías crónicas, la calidad de vida y el gasto sanitario. La iniciativa ha registrado este año un aumento de participantes en estos grupos de gimnasia, lo que avala la implicación del equipo de atención primaria y de los tutores en la formación y promoción del ejercicio físico de forma sistemática y correcta, adaptado a la edad y a sus enfermedades.
Imagen de archivo. Foto: KETUT SUBIYANTOEste proyecto ha demostrado que el ejercicio tiene "más beneficios" si se realiza de forma grupal y que "nunca es tarde para empezar a realizarlo". El ejercicio y las actividades en grupo ayudan a que los mayores entiendan esta etapa de la vida como "un ciclo más" de crecimiento personal en la que tienen que seguir desarrollando hábitos de vida saludables, físicos y mentales, han destacado desde la Diputación.
Además, han añadido que se ha comprobado que los pacientes crónicos que hacen ejercicio físico reducen el gasto en fármacos, sobre todo psicofármacos y analgésicos. Del mismo modo, sienten una mejora de la salud percibida, del dolor y de la calidad de vida. Por ello, este paseo que reúne a "tanta gente activa" y da "visibilidad" a esta iniciativa de envejecimiento activo y pretende animar a otras personas.
El Proyecto Activa comenzó en febrero de 2017 como un programa piloto en el centro de salud de Fuensanta, al que se apuntaron un centenar de personas que participaban asiduamente en estas actividades físicas con el objetivo de mejorar su calidad de vida.
Activa se ha extendido hasta implantarse en los centros de salud urbanos del departamento, que lo han acogido con "entusiasmo" porque, además de disfrutar del ejercicio físico de forma grupal y ayudar a la sociabilización del mayor, se evalúa la repercusión del ejercicio en el control de las patologías crónicas que sufren estas personas.
En 2018 se decidió extender el proyecto a los centros de salud de los pueblos (área metropolitana) del departamento, con la colaboración de los fisioterapeutas para la formación de los pacientes tutores.
La iniciativa ha demostrado que desde los centros de salud se pueden hacer "muchas cosas" que repercuten en un beneficio directo para los pacientes, más allá del abordaje terapéutico tradicional de las enfermedades, porque se ha comprobado que el ejercicio físico, adaptado a la edad y patologías de los pacientes es "una herramienta eficaz" para retrasar la progresión de la fragilidad, mejorar el bienestar psicológico e incluso retrasar la pérdida de memoria.
