Los retos del polo tecnológico valenciano para el nuevo curso

VALÈNCIA. Empieza el nuevo curso en el polo tecnológico valenciano. Tras el año de transición vivido en 2023 dadas las circunstancias macroeconómicas, 2024 arrancó con fuerza en el primer semestre, tanto en la creación de compañías como en la inversión de startups valencianas, que prácticamente ya supera la de 2023. Sin embargo, a pesar de las buenas sensaciones del año en marcha, septiembre es mes de nuevos retos para seguir avanzando y posicionarse entre las ciudades europeas pioneras en emprendimiento. 

El director general de Angels, Pepe Peris, tiene claro que una de las claves de futuro pasa por poner foco y especializarse. "Valencia tiene empresas que son referentes en sectores que están implementando tecnología de un modo acelerado, como la salud". explica el director del vehículo de inversión de Juan Roig, que también insiste en la importancia del talento. "El talento atrae talento, y se retiene con las condiciones óptimas, ese es el gran reto para crear un polo, crear el entorno y las condiciones competitivas para ello, que requiere un alineamiento a largo plazo entre el ámbito privado y la administración, y cuando eso sucede el capital viene solo". destaca.

La concejal del Innovación, Paula Llobet, recuerda que entre los objetivos de Valencia Innovation Capital también está posicionar Valencia como líder de la economía del conocimiento. "Apostar por el talento cualificado en las tecnologías clave que están transformando la sociedad, las empresas y las ciudades. Debemos ser líderes en innovación para tener una economía sólida, de bienestar y una ciudad de vanguardia", señala. Para ello, explica que su estrategia se basa en la sostenibilidad, la inteligencia artificial, la salud y el bienestar, la ciencia, la diversidad y las ciudades inteligentes. 

"Nuestra misión se centra en fomentar la educación hacia el futuro del trabajo y ayudar a nuestras empresas a ser más competitivas. Para ello debemos cohesionar el ecosistema emprendedor tecnológico con el tejido empresarial tradicional y tractor de nuestra ciudad", recalca. Por otra parte, menciona la apuesta por el sector del gaming debido al gran tejido especializado y de referencia que existe en la ciudad con Valencia Game City, iniciativa a la que se han sumado más de 30 empresas y que tienen su espacio en La Harinera. "Tenemos escuelas de formación referentes en la materia a nivel global, como ESAT, tenemos grandes profesionales formados aquí y eventos posicionados a nivel internacional", recuerda. 

Llobet también destaca la apertura de La Harinera. "Un espacio insignia en los próximos  años para el ecosistema emprendedor tecnológico local pero también nacional e internacional. La Harinera es el nuevo epicentro público de innovación en la ciudad. El hub de referencia que va a aglutinar toda la actividad del ecosistema y de donde saldrán en los próximos  años los nuevos líderes innovadores gracias a los programas que estamos trabajando en materia de formación, dinamización, internacionalización e inversión", asegura. Además, recuerda que se ha convertido en un centro de softlanding donde ofrecen a cualquier empresa tecnológica todas las facilidades para aterrizar en la ciudad.

En busca de las scale ups

El CEO de Startup Valencia, Nacho Mas, alude a dos retos a medio y largo plazo. "Por un lado, se debería seguir fomentando desde sus fases iniciales el emprendimiento innovador basado en ciencia y tecnología avanzada para seguir creando y atrayendo nuevas startups con alto valor añadido. Por otro lado, hay que desarrollar un entorno favorable para que las startups puedan crecer, madurar y convertirse en scaleups, que es la etapa donde mayor impacto producen. Para ambos retos, se necesitan estrategias eficaces de atracción y retención de talento que consecuentemente atraerán importantes inversiones siempre y cuando el polo tecnológico valenciano forme parte de los circuitos más importantes a nivel internacional", señala. 

Respecto a la internacionalización, Llobet señala acciones para facilitar la entrada a otros mercados con conexiones con hubs potentes tanto a nivel europeo como en otros continentes. "El objetivo es crear puentes con otros ecosistemas para facilitar a las startups su entrada en otros mercados y que escalen más rápido. Para ello hemos puesto en marcha “Valencia Innovation Alliance” una iniciativa liderada por el Ayuntamiento que supondrá más de 20 acuerdos en los próximos años con ciudades referentes de innovación", explica. Mientras, Mas apunta a la participación en programas y eventos tecnológicos de referencia internacional para que las conexiones no se tengan que producir a puerta fría.

"En este tipo de relaciones internacionales es muy importante trabajar con agencias gubernamentales pero también con las principales redes de inversores, emprendedores, medios de comunicación especializados y eventos tecnológicos. En este sentido, desde Startup Valencia hemos fomentado la relación con el ecosistema holandés a través de The Next Web que ha abierto a nuestros emprendedores muchas puertas en el centro de Europa, con Italia a través del evento We Make Future donde llevamos varios años acompañando a startups valencianas con gran éxito, con Estonia a través del programa e-Residency, con América Latina y USA a través de las misiones a Miami y en general con la comunidad tecnológica internacional a través de VDS donde el año pasado contamos con asistentes de 91 nacionalidades diferentes",destaca.

Mas también insiste en la necesidad de poner en valor y visibilizar mejor a nivel local los casos de éxito para demostrar que desde aquí también se puede triunfar y así inspirar a las nuevas generaciones de talento cualificado que se forma en nuestras reconocidas universidades." La difusión de los proyectos en redes sociales y medios de comunicación así como a través de premios y eventos, son clave para llegar al máximo número de potenciales emprendedores", destaca.

El polo innovador del Mediterráneo

"Cuando sales fuera Valencia suena en todo el mundo. Muchas empresas han elegido Valencia como sede de sus negocios, el número de profesionales ex patriados que se ha desplazado a nuestra ciudad para trabajar en remoto se ha multiplicado enormemente y todo esto ha favorecido que surjan nuevas oportunidad laborales para el ecosistema local. Nuestro trabajo debe centrarse en mejorar los servicios públicos para que las personas que viven y trabajan aquí dispongan de la mejor educación, sanidad, seguridad o transporte público", apunta Llobet.

"Desde Valencia Innovation Capital, estamos centrados en convertir a Valencia en el polo innovador y tecnológico del Mediterráneo. Con la colaboración del sector privado, estamos creando una comunidad de referencia repleta de oportunidades. Y como Administración Pública debemos estar atentos a estos nuevos escenarios para facilitar que se pueda vivir y trabajar de forma competitiva y con mejores ventajas", señala. 

Además, desde la ciudad se buscar ser un destino de referencia para los nómadas digitales de alto nivel. "Estamos convencidos de que sus conocimientos y experiencia pueden enriquecer enormemente nuestra comunidad, el mercado laboral y contribuir al desarrollo económico", apunta la concejal de Innovación. "Una comunidad internacional creciente, como la que hemos construido en Valencia, facilita establecer relaciones a nivel personal y profesional, facilitando la atracción y favoreciendo también la retención".

Fomento de la inversión

A nivel de inversión, una de las cuestiones que suelen ponerse sobre la mesa es la mayor participación del ecosistema local. "A nivel de inversión, por un lado habría que fomentar la cultura inversora local en innovación para potenciar una mayor participación de inversores locales en proyectos disruptivos"; señala Mas. "Por otro lado, es clave generar espacios de encuentro para conectar con los mejores inversores  y descubran las oportunidades de inversión en nuestras mejores startups. Una gran parte de estos descubrimientos suceden en el marco de eventos tecnológicos internacionales que disponen de competiciones de startups, zona expositiva con protagonismo para las startups y escenarios donde escuchar a los emprendedores presentar sus proyecto", destaca.

Mientras, Llobet apunta al establecimiento de un marco impositivo favorable para las empresas y sus trabajadores, que incluya incentivos fiscales que fomenten el crecimiento económico y la creación de empleo. Un camino en el que se encuentra inmerso. Además, destaca la necesidad de garantizar la seguridad jurídica y la estabilidad para las inversiones, creando un entorno confiable y predecible. "Queremos ser una administración amiga, facilitadora y por eso vamos a reducir los trámites y la burocracia para facilitar la apertura de negocios de manera ágil, así como acortar los tiempos necesarios para la obtención de licencias y permisos", recalca, cambios que sumarían al sandbox puesto en marcha recientemente.

Llobet también señala el avance en inteligencia artificial y smartcity con el impulso de los EDIC, las Infraestructuras Europeas Digitales de Gemelos Digitales y Citiverso y la de imagen del cáncer. "Van a marcar un antes y después tanto en la medicina como en la recreación de mundos virtuales. Somos referentes en Europa en estos ámbitos y tenemos que aprovechar este logro para mejorar nuestro posicionamiento, nuestra economía, nuestro empleo y la calidad de vida de los valencianos", recalca.

¿Y la administración?

Y, ¿qué más puede hacer la administración por seguir fomentando la creación y crecimiento de este tipo de compañías? "La Administración debe ser un agente más del ecosistema y el que dinamice que cada vez vengan más inversión extranjera y atraigan empresas que quieran establecerse en Valencia. Tenemos que coger velocidad para fomentar el talento emprendedor y hacerlo crecer, por lo que la Administración debería ir de la mano con el ecosistema. Como referencia, podemos aspirar a ser un polo de emprendimiento como lo es Málaga en tecnología y que cuenta con una Administración que lo visibiliza de forma constante", señala la directora general de Lanzadera, Marta Nogueras.

"En general, la administración a sus diferentes niveles, debe entender que el ecosistema tecnológico, aunque ahora no tenga un peso tan destacado en la economía como algunos sectores tradicionales, es vital, no sólo para acoger las empresas que están creando un futuro cada vez más próximo, sino también para impulsar la transformación de los sectores productivos que no van a quedar al margen de la disrupción tecnológica. Cuanto antes se entienda lo peligroso que es para nuestra competitividad depender casi en exclusiva de tecnologías desarrolladas fuera de nuestra fronteras, antes se empezará a priorizar de verdad el apoyo firme y sostenido al sector como están haciendo países de nuestro entorno como Francia o Portugal con serias políticas de retención y atracción de talento e inversión en startups", asegura Mas.