Menos tráfico y más inspecciones: València aprueba medidas anti ruido en Russafa mientras estudia la ZAS

VALÈNCIA. "Aprobar medidas preventivas en la zona del barrio de Russafa al
objeto de minimizar las molestias acústicas que pudieran producirse durante el proceso de
evaluación de los resultados como Zona Acústicamente Saturada (ZAS)". Así reza el acuerdo que previsiblemente se aprobará este viernes en la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de València y que supondrá la aplicación de unas normas cautelares contra el ruido en el mencionado barrio como limitaciones de tráfico o más inspecciones.

Se trata de medidas que buscan "disminuir el nivel sonoro exterior hasta situarlo en los objetivos de calidad acústica" y que permite aplicar la ordenanza municipal de ruido. Entre ellas, se encuentra el corte de tráfico "durante los períodos donde los niveles sonoros superen los objetivos de calidad", la "intensificación de la vigilancia por agentes de la autoridad", el "control del cumplimiento de los limitadores de potencia acústica en locales con ambientación sonora" o el "aumento de inspecciones y controles de consumo de bebidas en vía pública fuera del local".

Además, el Ayuntamiento también deberá adoptar "medidas de concienciación a través de la difusión de carteles y trípticos en la zona" y reforzar los servicios de limpieza y control de depósito de residuos de vidrio "durante el día y no en horario nocturno" para reducir así las molestias. Se prohíbe "la expedición de bebidas y alimentos en el exterior de los establecimientos, a través de ventanas o barras dispuestas al efecto y recayentes en vía pública" entre las diez de la noche y las ocho de la mañana y se limita el uso de máquinas expendedoras en vía pública: sólo se podrán utilizar "durante el horario de funcionamiento de la actividad".

El Ayuntamiento de València ya ha realizado el estudio sonométrico previo, si procede a una declaración de ZAS del barrio de Russafa, según establecen las ordenanzas municipales y tal como obligó una sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) en 2020. El estudio sonométrico ha sido elaborado mediante cuatro fases de medición estaciones de medición en continuo, a las que se ha sumado otra fase adicional en tres puntos de especial significación acústica.

En estos momentos, los servicios municipales se encuentran en fase de revisión de los resultados obtenidos por el estudio sonométrico. Por lo tanto, se está a la espera de la emisión del informe técnico que evalúe si procede el inicio de expediente la declaración de Zona Acústicamente Saturada del barrio de Russafa. Mientras, el Ayuntamiento aplicará las mencionadas medidas preventivas.

Según el consistorio, se trata de "propuestas e iniciativas que se aplican para mejorar y garantizar la calidad de vida de los vecinos del barrio de Russafa", y se establecen de acuerdo con la Ordenanza de Protección contra la Comunicación Acústica, que las permite en aquellas zonas de la ciudad "donde existan numerosas actividades destinadas al uso de establecimientos públicos y niveles de recepción en el ambiente exterior, producido por la adición de las múltiples actividades existentes y por la actividad de las personas que utilicen estos establecimientos".