VALÈNCIA (EP). La consellera de Hacienda, Economía y Administración pública, Ruth Merino, ha vuelto a negar que se hayan producido impagos generalizados a los trabajadores públicos de la Generalitat en los últimos meses, ya que ha afirmado que lo que hubo al inicio del año fueron retrasos en el pago de un total de 524 nóminas de sustituciones.
Según sus cifras, estos retrasos afectaron a 400 trabajadores de servicios sociales, a 117 del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), a seis del Instituto Valenciano de Administración Pública (IVAP) y a uno del servicio valenciano de empleo (Labora).
Así lo ha desgranado en una comparecencia en la comisión de Economía de Les Corts a petición de la oposición. Tanto PSPV como Compromís denunciaron una "oleada" de impagos a funcionarios y fallos en el pago de ayudas a la dependencia, nóminas a trabajadores sustitutos y profesores y transferencias a ayuntamientos y farmacias.
Merino, portavoz del Consell que comparten PPCV y Vox, ha rechazado estas críticas y ha preguntado a la oposición si "de verdad creen que hacen bien a algún trabajador público o a la ciudadanía tergiversando, exagerando o creando una alarma innecesaria".
"No fueron miles (de impagos), no fueron oleadas y no se extendieron por toda la Generalitat", ha recalcado, y ha explicado que lo que se produjo fueron retrasos en el pago de las nóminas de "algunos" (524) trabajadores sustitutos.
Además, ha sostenido que estos retrasos son recurrentes, se produjeron en los ocho años de gobierno del Botànic sin que se solucionaran y "no se han agudizado". "Estamos poniendo todo de nuestra parte para mejorar el funcionamiento y que las incidencias sean las menores posibles", ha garantizado.
Por áreas, la consellera ha reprochado a la oposición que hablara de una "oleada" de impagos en Labora cuando "fue un solo caso", al tiempo que ha destacado que la "inmensa mayoría" de las prestaciones de dependencia se abonaron dentro del plazo y "antes que en muchas otras ocasiones".
Respecto a la entrada en vigor del nuevo sistema de gestión económico-financiera Nefis, ha defendido la "valiente" decisión del Consell de ponerlo en marcha frente al "miedo" del Botànic de hacerlo antes de la campaña electoral del 28M.
"Ni técnicamente, ni económicamente, ni estratégicamente podíamos cambiar lo que estaba predestinado a ocurrir", ha dicho, y ha insistido en que "incluso con Nefis" no ha variado el volumen de incidencias en los pagos "posteriormente subsanadas".
Por parte de la oposición, el diputado socialista José Antonio Díaz ha rechazado el "oscurantismo y opacidad total" del Consell, ya que ha explicado que su grupo ha solicitado documentación sobre las incidencias en el pago de nóminas y "no han contestado la mayoría de consellerias".
"Y las pocas que han contestado desmienten los datos de la consellera: solo en Justicia salen más de 1.300 incidencias", ha desgranado en declaraciones a los medios antes de la comisión. Por tanto, ha reiterado que los impagos son generalizados.
Aitana Mas, portavoz adjunta de Compromís y exconsellera del ramo, ha advertido que hay "contradicciones" entre las consellerias que sufren incidencia en los pagos que "dicen que es culpa de Hacienda" mientras el departamento de Merino sostiene que "no tiene culpa de nada".
"Hacía muchos años, desde que gobernaba el PP, que no pasaba", ha aseverado, apuntando a "impagos de más de diez días de retraso en dependencia", en las nóminas de "más de 3.000 profesores" o en el salario de marzo de los trabajadores del Hospital de Elche.
Es más, la portavoz de Compromís ha denunciado el aumento del periodo medio de pago a proveedores (PMP), pasando "de poco más de 20 días a 53". "La Generalitat no tiene 'cash' para pagar a las empresas (...) El PP no está pagando ni a las empresas ni a los trabajadores", ha reprochado.
En su réplica, la consellera ha insistido en que los impagos no son generalizados y ha asegurado que no tiene conocimiento de impagos en Justicia y que su departamento contesta a todas las peticiones de documentación, además de afirmar que el Botànic hubiera sufrido "los mismos problemas" si hubiera continuado gobernando. Por eso ha pedido "complicidad" a la oposición en lugar de seguir con sus críticas.
Sobre el PMP, ha achacado la bajada del plazo en 2021, 2022 y 2023 a los fondos extraordinarios recibidos en estos ejercicios. "Ha existido un dopaje a la hora de tener una liquidez que ya se ha acabado", ha ilustrado, y ha remarcado que el periodo actual es el "habitual" si se compaña con años anteriores a 2020.
Dicho esto, Merino ha vuelto a reclamar la reforma del sistema de financiación autonómica al Gobierno y ha acusado a los grupos de la oposición de tener "el bolsillo muy abierto" cuando gobernaban en el Botànic, algo que ha ligado con la subida del déficit.