VALÈNCIA. ¿Existen fórmulas milagrosas que garanticen el aprendizaje del inglés de una manera rápida y eficaz? Especialistas dedicados al estudio de la lengua inglesa señalan que, ante cualquier oferta de estas características, además de fijarnos en el tiempo de aprendizaje, es preciso que valoremos su método de enseñanza y las destrezas del profesorado. Esto es así porque la fórmula mágica, si existe, solo se consigue motivando a los alumnos con un modelo educativo dinámico e innovador. Hay que tener en cuenta que en este ámbito hay un alto número de abandono porque, en muchas ocasiones, los alumnos sienten que no avanzan, que se aburren o se frustran al enfrentarse a la realidad idiomática. Y es que, como apuntan los expertos, la comprensión de una segunda lengua va más allá del conocimiento lingüístico y de la memorización de palabras y estructuras gramaticales. Es preciso que haya un trasfondo cultural creativo, una interacción continuada y una comunicación cercana.
Por esta razón a la hora de elegir un centro de estudios de inglés, para iniciarnos o para mejorar nuestro conocimiento, es aconsejable tener en cuenta una serie de pautas que nos ayuden. En primer lugar, los expertos sugieren que haya un proceso de maduración previo a la compra del curso. De este modo, evitamos la opción cómoda de elegir el centro de estudios más próximo a nuestro trabajo o vivienda, sin haber valorado preliminarmente su idoneidad. A veces una elección impulsiva termina por romper las expectativas creadas y perder el interés que nos movió a matricularnos.
Para que esa decisión sea acertada, antes de realizar la matrícula, es recomendable que nos informen sobre el sistema de estudios ya que es una de las claves para que, sobre todo los más pequeños, adquieran un nivel de compromiso con las clases y aprendan sin apenas darse cuenta.
“En nuestro caso”, señala Laura Coeli, coordinadora de los cursos de inglés de los sábados de Caxton College con más de 30 años de experiencia educativa, “hemos dejado de utilizar el libro de texto tradicional en los alumnos de 3 a 6 años y lo hemos sustituido por cuentos para enseñar explorando multitud de unidades didácticas. De este modo, el niño aprende jugando sin ser consciente puesto que se divierte con la experiencia pedagógica”. Además, Coeli explica que este método está basado en el sistema educativo británico donde a diario se trabaja mediante “proyectos educativos creativos”. En estas edades es importante que aprendan a través del juego y que “los profesores les inspiren confianza en el aprendizaje que, en ocasiones, puede ser al aire libre y con flexibilidad para que este estudio complementario no sea rígido ni el alumno lo sienta como una carga adicional a su rutina diaria”, aclara Coeli haciendo alusión a la práctica que imparte cada sábado para alumnos de todas las edades.
Esta misma idea se aplica a los alumnos de edades entre 6 y 12 años, aunque en este período se debe afianzar más su participación, hacerles ver que forman parte de una comunidad educativa donde pueden compartir ideas con profesores, realizar intercambios con otras clases, formar parte de competiciones, preparar exposiciones públicas, interpretar canciones, proponer lecturas que apelen a su identidad, es decir, “dotarles de recursos didácticos que llamen su atención para que a través de sus gustos personales se les seduzca y aprendan con facilidad”, enfatiza esta especialista de Caxton College.
Debido a que la frecuencia de este tipo de clases es limitada, una o dos horas a la semana habitualmente, es necesario maximizar el tiempo y que el profesor nativo o bilingüe, con su debida experiencia, sea un actor proactivo. En ese sentido, “sobre todo con las clases de adultos, es importante conectar con su realidad social y profesional, sus hobbies, sus lecturas, para así potenciar su producción oral y comunicativa. El libro en todos los casos, no debe ser más que un eje temático”, asegura Coeli.
Así, debemos asumir que no sirve cualquier planteamiento para estudiar inglés con eficacia. Como todo en la vida, “la profesionalización, la innovación pedagógica y la experiencia educativa van a ser factores fundamentales que hagan del aprendizaje un camino de éxito”, concluye Coeli desde este colegio británico que abre sus puertas los sábados por la mañana para compartir con la sociedad su visión académica y larga trayectoria británica.