VALÈNCIA. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, cumplió este lunes con la hoja de ruta que se había marcado tras su encuentro con Mariano Rajoy el pasado 7 de septiembre en La Moncloa. De aquella cita, el jefe del Consell extrajo el compromiso de sendas reuniones con el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, y con el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, además de la "voluntad política" por parte del presidente del Gobierno de cumplir la promesa realizada en la Conferencia de Presidentes celebrada en enero consistente en abordar en 2017 la ansiada -por el Consell- reforma del sistema de financiación.
Cinco semanas después de aquella reunión, puede decirse que los objetivos se han cumplido uno a uno. El pasado 4 de octubre De la Serna se reunía con Puig en el Palau de la Generalitat para, posteriormente, anunciar una inversión de 800 millones de euros en la red de Cercanías de la Comunitat. Este lunes, era el jefe del Consell quien visitaba la sede del ministerio para verse con Montoro: una cita que giró en torno a la reforma de la financiación.
Así, Puig llevó bajo el brazo dos mensajes claros respecto a esta cuestión: la necesidad de que la crisis territorial que afecta a España no paralice el desarrollo de la reforma, una cuestión de "justicia" para los valencianos y, en esta línea, exponer al ministro las bondades de cumplir con éxito la citada remodelación, que a juicio del Gobierno valenciano puede contribuir a mejorar la opinión del Ejecutivo central precisamente en algunos sectores de Cataluña y, en general, ayudar a pacificar el problema territorial.
Unas pautas que, tras una hora y media de reunión, fueron bien recibidas por Montoro o, al menos, se tradujeron en el desbloqueo de la reforma según aseguró Puig, quien a la salida del encuentro afirmó que el ministro se había comprometido a convocar de forma "inmediata" a la comisión político-técnica en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, que dé forma al nuevo sistema, por lo que el jefe del Consell recalcó mantener la esperanza de que pueda culminarse la remodelación antes de que concluya el año tal y como se comprometió Rajoy.
"Estoy absolutamente convencido de que es posible, y es necesario, el cumplimiento", afirmó Puig sobre los plazos marcados, para añadir que la postura del ministro va en esa línea: "Va a intentar abordar el compromiso de la Conferencia de Presidentes". Sobre esto, cabe recordar que el pasado mes de julio se hizo público el informe elaborado por la comisión de expertos, primer paso para la reforma, en el que se expuso la necesidad de aportar 16.000 millones de euros al sistema. No obstante, desde entonces el Ministerio de Hacienda que dirige Montoro no ha dado el siguiente paso de convocar la comisión técnico-política -donde cada CCAA tiene representación- que es la encargada de dibujar el nuevo modelo. Así pues, el compromiso de convocatoria inmediata de la citada comisión significa el primer paso para el desbloqueo.
Por otro lado, también se comentaron en el encuentro distintos asuntos como la tasa de reposición en la función pública, donde existe un compromiso asumido para que se cubran el 100% de las bajas en servicios fundamentales -educación, sanidad y servicios sociales- y un aumento hasta el 50% en el resto de departamentos, si bien esto se aplicará cuando se aprueben los Presupuestos Generales del Estado de 2018, cuyo avance en estos momentos se encuentra paralizado.
En cuanto a otros asuntos como la deuda histórica, las fuentes consultadas por este diario no pudieron concretar si se había abordado en la cita, si bien consideraron que este aspecto formará parte del debate que se abra en la comisión político-técnica dado que también se habló de esta cuestión en la comisión de expertos previa.
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