VALÈNCIA (EP). El expresidente de Italia Giorgio Napolitano ha fallecido este viernes por la tarde a los 98 años en el hospital Salvator Mundi, ubicado en Roma y donde permanecía ingresado desde hacía algún tiempo tras complicaciones en su estado de salud.
Napolitano ejerció como presidente de Italia entre los años 2006 y 2015, convirtiéndose en el jefe de Estado de mayor edad, pues rondaba los 90 años cuando dejó el cargo, y el primero en ganar una reelección, si bien apenas cumplió dos años de su segundo mandato, recoge AdnKronos.
Tras imponerse en las elecciones presidenciales de abril 2013 a Stefano Rodotà con un aplastante 73 por ciento de los votos, Napolitano anunció el 31 de diciembre de 2014, durante su habitual discurso de fin de año, su dimisión debido a motivos de salud.
Antes de ejercer como jefe de Estado, había ocupado ya la jefatura del Ministerio del Interior entre 1996 y 1998 durante el Gobierno del primer ministro Romano Prodi. Previamente, entre 1992 y 1994 ejerció como presidente de la Cámara de Diputados, la Cámara Baja italiana.
El Consejo de Ministros de Italia se reunirá el próximo lunes para decidir sobre el funeral de Estado para el exmandatario, mientras que el presidente del Senado, Ignazio La Russa, ha informado de que la capilla ardiente de Napolitano se instalará en el Palacio Madama, sede de la Cámara Alta italiana, recoge La Repubblica.
Uno de los primeros en salir al paso de la noticia ha sido el actual presidente italiano, Sergio Mattarella, quien ha aseverado que el país está "agradecido" a la labor que desempeñó Napolitano. "Gran parte de la historia de la segunda mitad del siglo XX se refleja en la vida de Giorgio Napolitano", ha manifestado.
En un comunicado difundido por el Palacio del Quirinal, Mattarella ha resaltado las convicciones antifascistas de Napolitano, su ashesión al movimiento comunista italiano, así como su "compromiso con el desarrollo del sur de Italia y de las clases sociales más bajas" y su "convencido europeísmo".
"Interpretó el papel de garante de los valores de nuestra comunidad con fidelidad a la Constitución y aguda inteligencia, con atención sentida a las peticiones de renovación presentes en la sociedad", ha señalado el jefe de Estado italiano, que ha trasladado a la familia de Napolitano "el pésame de toda la nación".
Por su parte, la primera ministra Giorgia Meloni se ha limitado a lanzar un comunicado en la página oficial de la Jefatura de Gobierno en el que "expresa sus condolencias" por la muerte de Napolitano. "Nuestro pensamiento y nuestro más sentido pésame para la familia", añade el escrito.
De igual modo, el ministro de Exteriores, Antonio Tajani, ha lanzado una publicación en sus redes sociales donde recuerda los años de trabajo junto al ya difundo Napolitano en el Parlamento Europeo. "No compartía sus ideas, pero lo considero un protagonista importante de la historia política italiana", ha apuntado.
Los ex primer ministros Matteo Renzi, Giuseppe Conte y el mencionado Prodi, también han mostrado su pesar por el fallecimiento de Napolitano y han recordado el legado de un político con 70 años de servicios al país. Entró en la Cámara de Diputados en 1953 como legislador por Nápoles.
Por otro lado, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha dedicado una publicación en sus redes sociales al expresidente italiano, al que ha catalogado no solo como un "imponente estadista" con un "fuerte corazón europeo", sino como "un ancla de estabilidad" para Italia.
"Ha sido un ancla de estabilidad para su país en tiempos difíciles, profundamente convencido de que una Europa unida redundaba en interés de sus ciudadanos", ha manifestado la presidenta del Ejecutivo europeo en su perfil de la red social X, anteriormente conocida como Twitter.
De igual modo, el Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, ha remarcado que las enseñanzas de Napolitano son "un faro para todos los reformistas". "Puso su pasión política al servicio de las instituciones italianas y europeas con rigor y valentía", ha dicho también en X.