VALÈNCIA. El Palau de la Música celebró ayer, día de luto por el aniversario de la Dana, un consejo extraordinario para aprobar sus cuentas para 2026. Y tan claro tenía el Ayuntamiento de València que se iban a aprobar —tienen mayoría absoluta, y por tanto no dependen más que de ellos mismos—, que publicó justo al inicio de la reunión, antes de que se votara, las cifras de las cuentas del próximo año.
Pero eso no les ahorró el lío por varios asuntos. El primero, la documentación remitida a los diferentes grupos municipales previa a la reunión. Según denuncia la oposición, faltaba el informe de Intervención, que forma parte del expediente y que, según el reglamento, han de recibir al menos con 48 horas de antelación para poder discernir su voto con conocimiento. “Lo que ha ocurrido hoy en el Consejo de Administración del Palau es intolerable. Es una vergüenza que un Consejo de Administración no tenga todas las garantías para poder votar”, denuncia la concejala Maite Ibáñez.
Ayer el PSPV—PSOE planteó incluso retrasar la votación o levantarse; el PP avisó que, aunque no se les había notificado, dicho informe estaba colgado desde horas antes en el sistema interno del Ayuntamiento. La única notificación de Intervención que precisamente recibió la oposición fue un documento en el que la sección apuntaba que aún no había hecho su dictamen.
Pero ya está hecho. Y si bien desde Intervención da su visto bueno para que las cuentas se elevaran, destaca varias deficiencias que precisamente también tenía preparado la oposición señalar en el consejo extraordinario.
Aumenta el presupuesto, pero con algunas lagunas
El Consejo Rector del Palau de la Música aprobó unas cuentas que ascienden a 20.890.000 euros, lo que supone un incremento de 1.225.000 euros respecto a 2025. Se trata de un avance de un 6,23% y el Ayuntamiento de València aporta 17,4 millones de euros de los ingresos previstos por ahora (su importe sube más, un 8,76%).
Destaca el aumento de la partida del capítulo 2, de gastos corrientes en bienes y servicios, que alcanza los 7,58 millones de euros, con un incremento del 29,8% respecto al ejercicio anterior. Según explica el Ayuntamiento de València en la nota remitida, “este aumento permite reforzar la contratación artística, las actividades audiovisuales vinculadas a la Mostra, así como la difusión y la comunicación de la programación. Destacan también las partidas destinadas a seguridad, publicidad, logística y servicios técnicos, imprescindibles para el funcionamiento diario del Palau”.
Intervención, en el informe al que ha tenido acceso este diario, señala en todo caso que hay partidas infravaloradas, como los refuerzos de la Orquestra de València (estimados en 100.000 euros, pero que este año, a 30 de septiembre, el Palau ya se había gastado 223.824 euros), o partituras. También destaca que estos presupuestos sí reflejan la esperable subida de gastos salariales por el nuevo convenio colectivo del Ayuntamiento al personal laboral (219 plazas en la RPT) pero subestima el también posible aumento de gastos de las plazas funcionariales (16 plazas en la RPT).
De hecho, el Palau de la Música prevé que el capítulo 1, dedicado a los gastos de personal, disminuya un 2,34%. En la nota de prensa remitida a los medios de comunicación previa a la reunión, el Ayuntamiento sostenía que esta partida también aumentaba “para recoger los ajustes salariales y la incorporación de nuevo personal necesario para la gestión de las actividades del Palau y de la Mostra. También se mantienen las mejoras sociales aprobadas para el personal de la Orquesta de València y se avanza en la modernización de la gestión interna y de los procedimientos administrativos”, pero tanto el informe económico como Intervención señalan que bajan. Preguntado al Ayuntamiento de por qué la nota pública contradecía la realidad, ninguna de las diferentes fuentes oficiales contactadas ha sabido dar una explicación. Tanto PSPV—PSOE como Compromís acusan al Ayuntamiento de mentir en una comunicación pública y oficial, que al cierre de esta edición y a pesar de haber sido señalada, no se ha rectificado.
Seis euros a la espera de las grandes reformas
Pero sobre todo, a los grupos de la oposición les alarma el capítulo 6, referido a las inversiones reales. En un contexto de obras continuas en el Palau —al que se le añaden sorpresas como la caída del techo en la Sala Iturbi el pasado mes de julio (que ha provocado el cierre de la sala, la necesidad de pagar alquileres a Les Arts para trasladar durante semanas la programación, y una intervención para arreglar y revisar todo el caramanchón de madera), o la avería del pasado domingo en la plataforma que tenía que llevar el piano y que provocó la cancelación de la actuación estrella del pasado concierto—, el Palau de la Música ha decidido presupuestar únicamente seis euros de forma simbólica.
Lo hacen “de futuras aportaciones de capital destinadas a inversiones, coordinadas con los Servicios Centrales Técnicos municipales para asegurar el máximo control técnico y la eficiencia en la gestión de obras de gran envergadura”, según la nota remitida. “El Palau de la Música se encuentra a la espera del informe final sobre la reparación de los paneles acústicos de la Sala Iturbi, que permitirá establecer un plan de actuaciones futuras sobre el edificio y sus instalaciones. Por ello, se mantiene abierto el capítulo del presupuesto para disponer de la aplicación presupuestaria correspondiente”.
Pero tanto Intervención como la oposición coinciden en censurar ese presupuesto simbólico que provocará que, desde el mismo 1 de enero, cualquier reparación mínima dependa de una modificación de crédito del Ayuntamiento que alargará cualquier proceso al no tener colchón alguno. El informe de Intervención añade “la incongruencia observada con el apartado Principales líneas de actuación para alzanzar el objetivo (…) al contemplar Inversiones y equipamientos: ejecución de inversiones para la modernización del equipamiento escénico, instrumental y audiovisual, así como en la mejora de la accesibilidad universal del edificio” y después solo prever seis euros.
“Lo que reflejan los presupuestos del Palau de la Música para 2026 es un auténtico desastre: Se reduce la partida destinada a personal en 300.000 euros menos, se amortizan plazas, y se deja la cantidad simbólica de seis euros para inversiones. Es incomprensible que, después del episodio grave del pasado domingo con un piano que no pudo acceder al escenario, la señora Catalá deje en seis euros una partida que debería dar respuesta a cualquier avería de última hora en el recinto. Es muy preocupante la deriva que está llevando el Palau. Pero esto es un retrato más de la incapacidad para gestionar que tiene este ayuntamiento”, concluye Ibáñez en su valoración.
Compromís también ha votado en contra de las cuentas. “El PP ha tratado de evitar la fiscalización y el control legal en el Palau de la Música en una muestra clara de irresponsabilidad y falta de transparencia. Quizás el que el PP quiere evitar son las continuas observaciones del órgano fiscalizador del Ayuntamiento que los reprocha cada año como muchas de las partidas presupuestarias no cumplen con las expectativas de ingresos y son poco realistas. Desde Compromís hemos votado en contra de los Presupuestos principalmente por esta razón. No podemos validar que el PP se bote los trámites legales y administrativos de control y fiscalización de reconocimientos de gastos que afectan el dinero de todos los valencianos y valencianas”, señala Gloria Tello en una nota remitida.
