VALÈNCIA. Susto en el Palau de la Música. Unos paneles del techo de la Sala Iturbi, la sala principal del auditorio, se rompieron la pasada semana durante los trabajos de limpieza y revisión del camaranchón. Así ha informado el presidente del Palau de la Música, el concejal José Luis Moreno, durante el Consejo de Administración del organismo celebrado este miércoles. 

Fuentes municipales señalan que el Ayuntamiento de València ha encargado informes externos y un peritaje para saber “si el incidente se produjo como consecuencia de los trabajos que realizaban los operarios de la empresa adjudicataria del anterior mandato de la reforma del Palau o se debe a otras causas arrastradas de anteriores reformas”. 

Estos trabajos formaban parte del seguimiento técnico ordinario de las obras, ejecutados por la UTE adjudicataria del proyecto. “El Ayuntamiento se va trabajar contrarreloj para resolver este problema y acometer además los problemas de goteras heredados, que están previstos para las próximas semanas”, señalan desde el Ayuntamiento.

La rotura de parte del techo del Palau de la Música llega cuando apenas han pasado dos años desde su reapertura al público. Fue en octubre de 2023 cuando el auditorio recuperó la normalidad tras permanecer cerrado durante varios años, en los que se acometió una batería de reformas después de que en noviembre de 2018 se desprendiera parte del techo de la sala Iturbi, una desgracia que no vino sola, pues en julio de 2019 pasó lo mismo en la Sala Rodrigo.

Desde el grupo Compromís, la concejala Lluïsa Notario ha acusado al gobierno municipal de “tirar balones fuera” tras conocer la caída del panel. “Le recordamos a Catalá, que por cierto sí se hizo la foto el día que se reabrió, que la obra se realizó bajo la supervisión de funcionarios municipales, cuya labor ahora se pone en duda contratando una auditoría externa. Esto supone despreciar su trabajo, cuestionar su competencia y además generar un gasto público innecesario solo por su obsesión por desprestigiar al anterior gobierno progresista”.  De igual forma, la de Compromís señala que “la obra está en garantía y, por tanto, como en cualquier otra obra, si se detecta algún desperfecto posterior, es la empresa la que debe hacerse cargo”.