VALENCIA (EFE/VP). La Asociación de Discotecas de Valencia ha empezado en una sala del barrio de Ruzafa una iniciativa para reducir las molestias causadas por el ruido y la presencia de clientes en la calle con el fin de lograr un modelo de ocio nocturno sostenible que aúne intereses de vecinos, clientes y empresarios.

En un comunicado, la asociación informa de que entre las medidas llevadas a cabo por su presidente, Óscar Iglesias, en la discoteca Picadilly destaca la creación de su propia campaña de mediación para evitar el ruido de los clientes en la calle.

Para ello, un equipo de hasta ocho personas, entre miembros de seguridad y mediadores sociales, se encargarán de controlar y dialogar con aquellos usuarios que permanezcan en las inmediaciones de local, para tratar de reducir al máximo el nivel sonoro en torno a sus instalaciones.

Otra de las medidas de choque que llevará a cabo este local será la restricción de la entrada a aquellos clientes que, con su actitud, alteren el descanso de los vecinos de la zona.

Con esta serie de actuaciones, esta discoteca de Valencia quiere convertirse en un referente empresarial en la creación de un modelo de sala sostenible con su entorno vecinal y con una oferta de ocio atractiva para sus clientes.

Representantes de la Federación de Hostelería de Valencia trasladarán medidas como éstas en las tres mesas de trabajo sobre Contaminación Acústica en los barrios del Cedro, Ruzafa y el Carmen que próximamente serán convocadas por el Ayuntamiento de Valencia y en las que, además de la FEHV, también estarán representados miembros del consistorio y de las diferentes asociaciones vecinales.

Por otra parte, la Federación de Hostelería ha presentado un recurso de apelación contra la denegación del recurso contencioso-administrativo contra la modificación de las medidas cautelares de la zona ZAS del barrio del Carmen.

Desde la FEHV se entiende que ha habido un incumplimiento del procedimiento de las medidas cautelares de la ZAS del Carmen, ya que se han modificado algunas de ellas (concretamente la del horario de cierre de las discotecas), sin haberse reunido la mesa de trabajo creada a tal efecto y que constituye un paso necesario y previo a cualquier modificación de la propuesta inicial.