VALENCIA. Rara es la semana que el boletín de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no informa de la 'defunción' de alguna sicav. Sin ir más lejos la semana comprendida entre el 21 y 27 de junio, la última antes de escribir estas líneas dado que el supervisor informa los martes de sus operaciones de registro, causaron baja tres más (GBI 9000, Elilulum Capital y Carlinvest 2014) y, además, ninguna vio la luz. O cuanto menos no recibió la pertinente autorización del supervisor.
Algo que también se repite semana tras semana y de hecho en el segundo trimestre del año solo ha visto la luz una: Obenque Capital. Esta sociedad de inversión de capital variable, gestionada por el Banco Santander, fue registrada oficialmente por la institución presidida por Elvira Rodríguez el pasado 24 de abril y desde entonces no ha habido ninguna alta más hasta ayer. Una sola apertura frente a 22 bajas, tal y como lo constató este diario ayer de la base de datos del organismo presidido por Elvira Rodríguez.
"Está claro que el que más y el que menos estaba esperando a conocer el resultado electoral en España, dado que las encuestas daban una mayoría al bloque de izquierdas que de haber sucedido hubiera impactado directamente sobre las sicavs. Pero las encuestas fallaron y los grandes patrimonios respiraron", apuntan desde una gestora de fondos de inversión consultada por este diario. "Ahora solo falta que de una vez por todas Mariano Rajoy logre formar gobierno y que las aguas vuelvan a su cauce porque tener una sicav no es ilícito y su tributación es la misma que la de un fondo de inversión", añaden.
Conviene recordar que la única propuesta del PP sobre estas sociedades enfocadas a las altas rentas, que ya la llevaba en su programa del pasado mes de diciembre, era la de "modificar del régimen de las sicavs para garantizar su carácter colectivo: sólo se computarán a efectos del número de los 100 accionistas, los que tengan una participación superior al 0,55%".
Por su parte, Podemos iba más lejos y proponía "dejar de tributar al 1% y su tributación se equiparará al impuesto de patrimonio, aplicándosele el tipo máximo contemplado por dicho impuesto"; además de establecer un periodo de permanencia máximo para las plusvalías acumuladas y un porcentaje de participación máximo para cada inversor" y de atribuir a "la AEAT la facultad para comprobar el cumplimiento de estos requisitos arbitrándose un plan especial para regularizar las situaciones fraudulentas".
A lo largo del primer semestre solo han sido registradas en la CNMV 15 nuevas sociedades de inversión de capital variable -frente a 41 bajas-, que aunque estén enfocadas a las grandes fortunas también pueden participar los pequeños ahorradores desde menos de 10 euros por cuanto cotizan en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), lo que equivale a la cifra más baja desde 2009 cuando en los seis primeros meses se habían creado -y el supervisor les había dado la pertinente autorización- a otras 15 sicavs.
Durante el pasado año recibieron el visto bueno de la CNMV 86, una cifra inferior a las 103 de 2014. "La gente temía la victoria de la izquierda y de ahí esta caída, dado que no pocos se las llevaron fuera de España y otros incluso las fusionaron con fondos de inversión", explican las mismas fuentes.
Precisamente la fusión con un fondo de inversión, bien español o bien extranjero, ya lo había puesto sobre la mesa en este diario el pasado 20 de abril Alejandro Martínez, cofundador de la EAFI valenciana EFE & ENE. "Para ello es imprescindible un motivo económico válido, como la reducción de costes operativos, pero nunca un motivo puramente fiscal. Eso sí, el fondo ha de tener una política de inversión que encaje como un guante con los objetivos del cliente, y estudiar caso a caso es parte de nuestro trabajo", advertía entonces.
Según los datos del cierre del primer trimestre del año de Inverco, la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones, a 31 de marzo pasado el patrimonio de las 3.411 sicavs que circulaban por España era de 33.046 millones de euros, un 3,04% por debajo de los 34.082 millones al cierre de 2015 y todavía más lejos (casi un 7%) de los 35.506 millones al cierre del primer trimestre del pasado ejercicio.
En cuanto al número de partícipes -'mariachis' incluidos- los números también son descendentes, al pasar de los 486.749 de finales de 2015 a los 485.758 del último día del mes pasado. En resumen menos aperturas, patrimonio y partícipes, tal y como ya avanzó Valencia Plaza el pasado 12 de abril. "Menos mal que las encuestas del 26J fallaron porque sino estaríamos hablando de unas cifras mucho peores, despidos en la industria financiera y auténtica fuga de capitales", añaden desde la gestora de fondos de inversión.