La firma presidida por Sol Daurella, que debutará en el parqué español el próximo jueves, tendrá una baja liquidez inicial y los fondos americanos podrían salirse de la compañía
VALENCIA (VP/EP). Coca-Cola European Partners, el mayor embotellador mundial independiente de la multinacional, ha estimado que los gastos relacionados con la salida a Bolsa, prevista para el 31 de mayo en Nueva York, Londres y Amsterdam, y para el 2 de junio en España ascenderán a 253 millones de euros, IVA incluido, según consta en el folleto registrado de cara a su debut bursátil.
La nueva compañía, surgida de la fusión de Coca-Cola Iberian Partners, Coca-Cola Enterprises y la embotelladora alemana, saldrá a Bolsa con una capitalización bursátil superior a los 20.000 millones de euros y con la intención de destinar entre el 30% y el 40% del beneficio a dividendos.
En concreto, la compañía, que no realizará una OPV previa ni una OPS, aterrizará en el parqué mediante el sistema de 'listing', con la venta de acciones directamente en el mercado de Coca-Cola Enterprises, que actualmente cotizan en Nueva York. La firma americana controlará el 48% del gigante embotellador, mientras que el resto del capital se repartirá entre Coca-Cola Iberian Partners, que ostentará el 34%, y The Coca-Cola Company, que controlará el 18%.
El gigante embotellador, presidido por la española Sol Daurella, dado que debutará mediante el sistema de 'listing', no fijará una banda de precios previamente, sino que se tomará como referencia el último precio de las acciones de Coca-Cola Enterprises en la bolsa norteamericana, que ayer cerraron a un precio de 51,29 dólares, con un ascenso del 0,59%. En España, compañías como Dia o Liberbank desembarcaron en el parqué a través de este sistema, que no posibilita una venta de títulos previa.
Al no haber actividad bursátil en Nueva York y Londres el próximo lunes, 30 de mayo, el precio orientativo de salida será el que marquen mañana las acciones de Coca-Cola Enterprises en el parqué norteamericano.
Coca-Cola Enterprises ha aprobado este semana la operación y sus accionistas recibirán una acción de Coca-Cola European Partners por cada uno de sus títulos más el pago en efectivo de una prima de 14,50 dólares. Esta parte en efectivo, que sumará un total de 3.300 millones de dólares, es la que se financiará con la emisión de bonos realizada antes de su salida a Bolsa.
Fuentes del mercado consultadas por Europa Press han indicado que inicialmente la liquidez y el volumen de circulación de Coca-Cola European Partners, con un 'free float' inicial del 48% y con sede en Londres, será baja, al tiempo que han estimado que fondos estadounidenses pueden salir de la compañía al estar condicionados por sus políticas de invertir sólo en Estados Unidos.
De hecho, la propia compañía reconoce en el folleto que el hecho de estar centrada geográficamente en Europa Occidental puede "limitar" el interés de los inversores estadonidenses.
Este es uno de los riesgos que apunta la nueva compañía de cara a su salida a Bolsa, al tiempo que advierte de que la incertidumbre política en España y las preocupaciones sobre movimientos independentistas dentro de la Unión Europea podrían tener un impacto adverso sobre su negocio, sus operaciones y sus condiciones financieras.
En concreto, en el caso español señala que si tras las elecciones generales del 26-J persiste la incapacidad del futuro Parlamento de elegir a un presidente del Gobierno que pueda conformar un Ejecutivo, esto puede acarrear un impacto "adverso" en la economía española, y, por ende, afectar negativamente a la compañía.
Igualmente, señala que si un nuevo gobierno es elegido en España tras las elecciones generales, las políticas adoptadas pueden tener un impacto material adverso en la economía española y, por extensión, en el negocio de la empresa.
El embotellador europeo ha alertado de que la integración de tres sociedades indepedientes es un "proceso complejo, costoso e intensivo" y que se "enfrenta a una fuerte competencia" de otras compañías de bebidas generalistas o especializadas.
En cuanto a la política de retribución al accionista, la empresa subraya que la capacidad de la sociedad para pagar dividendos depende de sus resultados, su situación financiera, sus perspectivas de futuro, los beneficios disponibles para su distribución y otros factores que los consejeros consideren relevantes en ese momento. "No puede haber ninguna garantía de que la sociedad vaya a pagar un dividendo", ha indicado la compañía, que, no obstante, precisa que su objetivo es destinar entre el 30% y el 40% del beneficio a retribuir al accionista.
En el folleto, la compañía ha subrayado que su intención es crecer de forma orgánica o a través de la búsqueda de inversiones "disciplinadas y atractivas", como por ejemplo con fusiones, adquisiciones o reestructuraciones, a lo que se suma además invertir aproximadamente entre el 4% y el 5% de las ventas netas anuales en proyectos de capital con un "retorno atractivo".
Los accionistas españoles de Coca-Cola European Partners, es decir la familia Daurella y el resto de socios como la familia Gómez-Trenor y José Ignacio Comente, tienen un compromiso de permanencia en el accionariado ('lock-up') de 365 días, periodo en el que no podrán desprenderse de sus acciones, lo que supone la apuesta y la confianza en el crecimiento del negocio.
Con 25.000 empleados, el gigante embotellador dará servicio a una población de más de 300 millones de personas en 13 países de toda Europa Occidental, que incluyen España, Andorra, Portugal, Islandia, Alemania, Bélgica, Francia, Gran Bretaña, Holanda, Luxemburgo, Mónaco, Noruega y Suecia.