VALÈNCIA. El Palacio de Congresos de València llega a su 25 aniversario con unas perspectivas muy halagüeñas: el volumen de actividad podría superar en torno a un 8% los registros alcanzados en 2019, hasta ahora el mejor ejercicio de su historia, y crecer un 14% por encima de las cifras de 2022: ya hay confirmados 23 congresos que atraerán a la ciudad alrededor de 30.000 participantes, que generarán 90.000 pernoctaciones. “Teniendo en cuenta las previsiones para 2023, el incremento del negocio desde 2016 se pueda situar en un 36%”, comentan desde la institución.
Con ellos, el Palacio de Congresos de València alcanzará en este cuarto de siglo los 3.200 eventos (de los que destacan los 700 congresos y las 300 convenciones, que contaron con 480.000 y 174.019 participantes respectivamente) a los que han acudido más de 2.300.000 personas, generando 2,4 millones de pernoctaciones en la ciudad, lo que redunda en la dinamización de la economía local. Y en cuanto a los ingresos por actividad internacional, estos han aumentado un 88%, pasando de 686.706 euros en 2016 a 1.293.000 euros en 2022. Además, desde el ejercicio 2016 el Palacio ha ganado 160 candidaturas de grandes eventos nacionales e internacionales, por valor de 6.985.690 euros en espacios. Solo en el año 2022, esta tipología de eventos ha supuesto el 73,6 % del negocio.
Unas cifras que hace siete años parecían difícil de alcanzar. A principios de 2016, la institución tenía una deuda financiera con entidades de crédito y empresas proveedoras por más de 5,5 millones de euros, derivada de la crisis económica de los años 2007-2013, en los que había financiado los resultados negativos con endeudamiento bancario y el incremento de la deuda comercial con dichas entidades proveedoras.
Ante esta situación, el recinto con el apoyo del Ayuntamiento de València pone en marcha una estrategia para hacer frente a este desafío: reestructura la deuda con las entidades financieras y a través de un préstamo del Ayuntamiento de 1.724.785 euros, liquida la deuda comercial con proveedores. A final de 2019, fruto de los buenos resultados económicos y aportaciones municipales, el Palacio es capaz de eliminar la deuda financiera con las entidades de crédito y con el propio Ayuntamiento. Pasando a tener, desde ese momento hasta la actualidad, una situación de solvencia en lo económico y en lo financiero.