La empresa local de patatas fritas ha conseguido un prestigioso sello de calidad a nivel europeo
VALÈNCIA. La empresa de Alberic Papas Argente ya puede decir que es una empresa con estrella. Esta misma semana, el International Taste Institute de Bruselas les ha comunicado que han sido galardonados con una estrella, lo que les otorga un prestigioso sello de calidad a sus productos. Vicente Revert, uno de los responsables de esta empresa familiar, se muestra sorprendido y asegura que “no nos esperábamos este premio por parte de un organismo tan reconocido entre las marcas de alimentación”.
Esta pequeña empresa familiar de aperitivos, especializada en la fabricación de patatas fritas, ubicada en la localidad de Alberic, lleva en pie 96 años y actualmente cuenta con una plantilla de 35 trabajadores. “Solemos ir a ferias de alimentación como la del Salón Internacional de la Alimentación de París o la ANUGA de Colonia y alguna vez habíamos pensado en presentarnos al concurso, pero no nos atrevíamos”, confiesa Vicente Revert. “Estábamos tan acostumbrados a ver a grandes marcas que pensábamos ¿cómo vamos a optar a este premio? No lo veíamos alcanzable para una empresa familiar como la nuestra”.
Una vez superadas las dudas, sin embargo, han salido victoriosos. Desde Papas Argente aseguran que han aprovechado para presentarse ahora porque “este ha sido un año muy importante para la empresa”, en relación con el crecimiento experimentado en los últimos tiempos. “Llevamos un par de años afianzándonos en el mercado internacional y, actualmente, exportamos nuestro producto a 28 países”, apunta orgulloso Revert, “nos hemos dado cuenta de que nuestras patatas fritas gustan y que hemos conseguido fidelizar las ventas. Por eso decidimos intentarlo”.
Tras dar el paso y apuntarse al concurso, los propietarios dela empresa enviaron una muestra de su producto para participar en una “rigurosa evaluación sensorial llevada a cabo por chefs y sumillers pertenecientes a las asociaciones y organizaciones culinarias más importantes de Europa”. Estas catas se realizan a ciegas por un jurado compuesto por 200 chefs, en los que estos no conocen ni la marca ni el país de origen de los alimentos o bebidas que están probando. Así, el International Taste Institute elabora un ranking con los mejores productos de cada tipo siguiendo una serie de criterios basados en elementos como el sabor, la calidad o la presentación.
En sus inicios, cuando nació en 1924, Papas Argente solo distribuía a nivel local y los pueblos más cercanos. Pero poco a poco fue creciendo y posicionándose a nivel nacional. “Actualmente tenemos distribuidores en casi todas las provincias de España, un buen dato teniendo en cuenta el gran nivel de competencia que tenemos en nuestro país con un elevado número de fábricas de patatas fritas”, argumenta Revert.
Sin embargo, su crecimiento más destacado empezó hace aproximadamente cuatro años. “A diferencia de otros snacks que fabricamos que tienen una vida útil larga, la de las patatas fritas es bastante más corta y eso nos hacía más complicado exportarlas a otros países. Pero hace cuatro años empezamos a trabajar en ello con una gran inversión en I+D. Por ejemplo, ahora envasamos nuestro producto en atmósfera protectora, y eso nos permite que aguante mucho más. Finalmente, hemos conseguido que tengan una vida útil de 10 meses y que podamos comercializarlo en el extranjero”, relata uno de sus responsables.
Gracias a este galardón sus propietarios esperan conseguir incrementar las ventas, ya que son conscientes de que se trata de un reclamo de marketing “muy potente en toda Europa”. “Esperamos notarlo en las ventas. De hecho, en cuanto se nos acabe el material de plástico que tenemos para hacer el envase, vamos a incluir en nuestras bolsas este premio para que la gente lo sepa y podamos crecer”, explica orgulloso Revert. “Tenemos un compromiso absoluto con el sabor de nuestros productos porque sabemos que es clave para que nos elijan. Es por ello que estamos continuamente mejorando nuestra calidad y realizando consultas con nuestros consumidores para saber cuáles son sus gustos y debilidades. Este premio nos empuja a seguir en esta dirección y nos permite dar un salto más a nivel internacional”.
Pero este premio no solo supone un éxito para la empresa, el alcalde de Alberic, Toño Carratalá, comparte la alegría de esta pequeña empresa local y reconoce que les afectará muy positivamente. Se trata de una localidad que cuenta con dos empresas fabricantes de patatas fritas con un gran reconocimiento a nivel internacional. “Que reciban este reconocimiento internacional tiene mucha importancia para nuestra economía local, es una noticia extraordinaria para Alberic”, ha expresado el primer edil, “esto demuestra que están trabajando muy bien y que son un referente, especialmente en los últimos años que han conseguido adquirir una relevancia internacional muy destacada. Además, consiguen que el nombre de Alberic circule por todo el mundo, para nosotros es un orgullo que cuando viajas fuera conozcan nuestro producto local”.
A lo largo de los años, desde su fundación en 2005, más de 16.000 productos han sido certificados por el jurado del Taste Institute, que incluye prestigiosos chefs y sumilleres como Ferran Centelles (Chef sommelier de la Fundación El Bulli), Manuel Jiménez (Mejor Sumiller de España 2017), Alain Nonnet (2 estrellas Michelin durante 36 años), Gaetano Raguni (Ganador de Italia Bocuse d'Or 2017), Alan Coxon (Embajador británico de alimentos y bebidas y presentador en la BBC TV Chef) o Cristina Figueira (1 Estrella Michelin).