Y a lo mejor soy generosa con el título de la columna. La sesión de control al Gobierno cada miércoles se convierte en un suplicio mediático. No es ejemplo ni para el sistema democrático ni menos para los ciudadanos. La disputa parlamentaria de altura, el debate confrontando ideas encontradas es positivo, pero el insulto y los gestos vejatorios, no
Ana Pastor, la Presidenta del Congreso. Es una mujer austera, contenida pero firme. Se enfrenta cada miércoles a sus señorías que se esfuerzan en hacer todo lo contrario a lo que debería ser el parlamentarismo. Empieza a ser difícil controlar la situación. Defiende Pastor que el Congreso es la casa de la palabra y que no deben consentirse los insultos ni las descalificaciones. Va camino de convertirse en una/o de las/os mejores Presidenta/es de la Cámara. Su emoción y justeza al reconvenir a sus señorías por sus malas practicas, reconforta al ciudadano. Es respetada por todos los grupos y siempre tiene la palabra precisamente justa y respetuosa para poner a todos en sus sitio. Arbitrar las sesiones parlamentarias casi se está convirtiendo en deporte de riesgo. Habría que pedir a sus señorías que se esmeren en sus intervenciones. Recordamos que nos representan y en algunas ocasiones da la sensación de que no son conscientes de ello. No es cuestión de generalizar, pero nos estamos acostumbrando a espectáculos impropios y no debería ser así. Lo de patio de colegio casi se queda corto.
Baja calidad democrática en las formas y en el fondo. Se corre el riesgo de que esta idea no sea solo una sensación sino una realidad. Las formas en democracia, los ritos, los protocolos y la dinámica parlamentaria son importantes porque reflejan un modo de hacer que nos representa. El respeto en la exposición de ideas, la creatividad, el ingenio, la frescura y la inteligencia son virtudes que se deberían practicar. Claro que es bueno el debate y la controversia. En la práctica parlamentaria son sinónimos de que la política está viva y cumple su función. Y ese es el verdadero fondo de la cuestión, la representación del ciudadano. Es vergonzante ver determinados comportamientos vejatorios entre los diputados o senadores. Diera la sensación que pierden el oremus no sé si de manera intencionada o descuidada. Da igual, están en un ámbito público cumpliendo esa función pública par dar confianza al ciudadano, porque es su responsabilidad. Y no deberían olvidarse de ello. Por no caer en el tremendismo y lo negativo, a los españoles nos ha costado mucho llegar a conquistar nuestro sistema democrático y debemos cuidarlo. Esta llamada de atención que hacía Ana Pastor debería hacernos recuperar el sentido común, evidentemente a alguno más que a otros.
Forzar la máquina del rédito electoral. Muchos dirán que estos enfrentamientos que van más allá de lo visceral son solo escenificaciones para las teles, los tuits y demás prosopopeya mediática. Este juego trivial y ofensivo en muchos casos parece un capítulo más de los previos electorales. Ambas cámaras, Congreso y Senado, en especial la primera se han convertido en auténticos platós electorales. Se avecina ya el bucle de comicios con la consulta andaluza, y al final los rifirrafes parlamentarios son un acto más de campaña. A lo mejor a alguno se les ha ido de la mano el asunto y lo puede pagar caro. Forzar la máquina puede ser contraproducente para conquistar el voto. El ciudadano está cansado y harto de tanto postureo, declaraciones y gestos altisonantes, extravagantes y despectivos. Y todos los partidos políticos no sé si alegremente se han prestado a esta función por mor de conseguir esos ansiados resultados electorales. Crispación gratuita que no lleva a ninguna parte. Si acaso unos videos virales y un prime time en la tele. Como dicen los clásicos demoscópicos, la encuesta real será el día de las elecciones y veremos como queda cada uno en la foto final. El retrato será el definitivo y llegará como consecuencia de los méritos y deméritos de unos y otros.
PSOE: A Pedro Sánchez se le hacen los dedos huéspedes con los cálculos electorales, los jueces y los presupuestos. Ha llegado un momento en que no sabe a que atender. Siempre en ayuda y socorro del líder, el adelantado Secretario de Organización del partido, José Luis Ábalos tira la cometa, a ver que pasa con la celebración de un Superdomingo electoral el 26 de Mayo (generales, autonómicas, municipales y europeas). La tentativa es atractiva. Falta saber como quedan las cosas en Andalucía. Se podría probar también con un adelanto electoral en la Comunidad Valenciana y según los resultados podríamos ir a la madre de todas las elecciones. ¿Es un globo sonda para presionar a los socios del gobierno para que apoyen los presupuestos? ¿Cuándo dice la verdad Sánchez, al afirmar que se le acorta la legislatura por falta de apoyo en las cuentas o cuándo asegura que quiere cumplir la legislatura completa? Mientras la cuestión catalana ha derivado esta semana en la ruptura del pacto entre PP y PSOE para la elección de miembros del CGPJ, incluido su presidente y el del Tribunal Supremo. La carambola estaba clara, el magistrado Manuel Marchena, propuesto por los populares, dejaba de ser el juez que juzgase el procés y presidiría el Consejo, pero la proactividad wassapera ,-si existe el palabro-, popular lo ha evitado. A resultas de lo cual no hay acuerdo y seguirá en funciones al frente de ambas instituciones el discutido Carlos Lesmes. Mientras la Ministra de Justicia , Dolores Delgado ha decidido purgar al abogado del Estado que proponía acusar de rebelión a los políticos presos del procés y que a criterio de la Ministra incumplió instrucciones. En fin todo muy edificante e igual que sus antecesores populares en el cargo. Y si ya vamos con los presupuestos, seguimos donde estábamos o peor. El FMI ha rebatido punto por punto las cuentas de Sánchez, como han hecho la UE y la OCDE que nos piden rebajar las cifras de crecimiento y subir el IVA entre otras cosas. Lo del acuerdo presupuestario parece que ni está ni se le espera. Las cuentas de Mariano Rajoy podrían ser prorrogadas. ¿Qué pensará el registrador de la propiedad? Y atención que a Pedro Sánchez lo tenemos en Cuba. No habrá encuentro con la disidencia opositora y sí con artistas y cocineros.
PP: Pablo Casado no sale de una y se mete en otra. Por voluntad propia o de sus conmilitones, no hay semana que no tenga su aquel. Tras la crisis Cospedal a cuenta de las grabaciones Villarejo, está visto que los populares están reñidos con las tecnologías. Unos días son las grabaciones subrepticias y otro los wassaps traicioneros. Da igual si el origen fue el reenviador y portavoz en el Senado, Ignacio Cosidó o el ex Ministro Rafael Catalá o el Secretario General Teodoro García Egea. La torpeza es de tal calibre que da miedo pensar que es así, como decían los mensajes, que efectivamente estaba todo controlado con el juez Manuel Marchena en el CGPJ y en el Supremo. Tanto bosque y hojarasca no les deja ver con claridad. No disciernen entre lo urgente y lo importante. Andalucía será la piedra de toque. Un sorpasso de Ciudadanos sería una debacle para futuras consultas. Y aunque Pablo Casado se alegra con un superdomingo, al menos con la boca pequeña, una consulta masiva podría traerle malos réditos electorales. La falta de relato les lleva a mal traer. Necesitan colocar mensajes para el futuro, pero antes tienen que resolver al menos estratégicamente algunas disfunciones internas. Les va en ello su supervivencia.
UNIDOS PODEMOS: Pablo Iglesias hiperventila con las elecciones. Qué necesidad de protagonismo y de elecciones. El día que Ábalos sugirió la posibilidad de una superconsulta el domingo 26 de mayo, Iglesias convocó a sus huestes para prepararse ante el combate. Qué hiperactividad a deshora o no, según se mire. Cierto es que no lo tiene fácil. El BOE lo tiene Pedro Sánchez y el PSOE y a poco que se despiste se le escapan de los dedos de su control Andalucía, Barcelona, Galicia y Madrid, donde el guirigay que hay con Manuela Carmena y los concejales de Podemos es de considerables proporciones. El líder podemita como siempre se acelera y no sabe dónde situar la diana de sus ataques. El caso es que se va quedando solo en la dirección después de depurar a todo el que osa discutirle. Se le veía contento con el pacto presupuestario con Sánchez, pero aquello ya es historia y es papel mojado, salvo que los nacionalistas decidan otra cosa.
CIUDADANOS: Albert Rivera error de cálculo y fuera de juego. Mira que le gusta una sesión de control al Gobierno más que otra cosa por aquello de los titulares. Con el mambo protagonizado por las huestes de ERC y el no estaba. En otra ocasión será. Mientras se afana en el cuerpo a cuerpo con Casado en Andalucía, aunque debería preocuparse por Cataluña. La clave Manuel Valls le lleva de cabeza. Para aunar criterios el catalán afrancesado se has reunido con la candidata por Madrid, Begoña Villacís, pero mientras tanto en Barcelona cunden los nervios. Valls con personalidad propia quiere incluir en su plataforma al PSC y eso choca con las intenciones de Rivera. Su apuesta por Valls se le puede volver en contra. Y mientras Inés Arrimadas haciendo campaña en Andalucía, que está bien, pero descolocada con Valls.
Pedro Sánchez, Presidente del Gobierno: “Sin presupuestos, mi vocación de llegar al final de la legislatura se ve acortada” ¡¿Globo sonda o nos acercamos al Superdomingo?!
Manuela Carmena, Alcaldesa de Madrid: “No estaré en la oposición si no soy alcaldesa” ¡Estrategia electoral y vaya presión para Pablo Iglesias y el lío de los concejales de Podemos que apoyan a Carmena!
Josep Borrell, Ministro de Exteriores: “El señor Rufián lo único que sabe hacer es verter serrín y estiércol” ¡Miércoles sesión de Control al Gobierno, con supuesto escupitajo y expulsión de Rufián... todo muy edificante!
Albert Rivera, Presidente de Ciudadanos evita definir a VOX: “No soy analista político, eso se lo dejo a los periodistas. Soy solo un líder político” ¡Ay madre, la campaña electoral y el desmarque por si acaso…!
Teodoro García Egea, Secretario General del PP, sobre los wassaps del senador Ignacio Cosidó: “Conocí los mensajes por la prensa cuando se publicaron. Habrá que preguntarle al senador” ¡Uy...de ahí al “ese señor por el que usted me pregunta”, queda poco!
Antonio Garrigues Walker, jurista: “Los políticos españoles se han ganado a pulso su baja credibilidad. Utilizan un lenguaje cansino y nos llevan a las pequeñeces” ¡84 años de lucidez y análisis!
Dani García, chef malagueño que ha recibido su tercera estrella Michelín: “Es la primera vez que disfruto de lo que significa una estrella que he buscado a muerte y que me obliga a reflexionar” ¡Trabajo, constancia y creatividad premiados!