¿Peajes metropolitanos en València?: así es el sistema en ciudades como Londres o Estocolmo

VALÈNCIA. El Plan de Movilidad Metropolitana de València que prepara la Generalitat Valenciana abre la puerta a poder implantar peajes en algunas zonas. Un sistema de cobro a los conductores según el uso de la carretera que hagan que ha generado controversia y que, según explica en el propio plan, ya se aplica en otras ciudades europeas, como Londres o Estocolmo. ¿Cómo es allí el sistema de peajes urbanos

Este sistema se puede implantar por áreas y con horarios. En el caso de ambas ciudades, el peaje lo pagan aquellos conductores que entran o salen de la zona central de las respectivas capitales. En Londres se aplica desde 2003; y en la capital sueca, desde 2007 y después de un referéndum en el que sólo la ciudad de Estocolmo aprobó por la mínima el peaje, mientras que los municipios próximos lo desaprobaron.

El sistema empleado en ambas capitales es el del pago por acceso -o circulación-: se abona una cifra fija al día independientemente de cuánto se circule. En Londres, por ejemplo, la tarifa asciende a 15 libras (casi 18 euros) cada día de acceso; mientras que en Estocolmo se paga cada vez que se entra y sale del área afectada y el precio depende de la hora: va en ascenso a lo largo del día desde las 15 coronas (1,40 euros) a las siete de la mañana a las 45 (4,20 euros) a las cinco de la tarde, para volver a disminuir progresivamente.

En ese sentido, el Plan de Movilidad Metropolitana en el que trabaja la Generalitat Valenciana también contempla otro método diferente, según el cual los conductores pagarían no por el hecho de acceder, sino en función de los kilómetros recorridos dentro de una cierta área.

En cuanto a las horas, en Londres se paga por acceder a la zona delimitada de 7:00 a 18:00 entre semana, y de 12:00 a 18:00 en fin de semana y festivos, mientras que es gratis en Navidad y Año Nuevo. Horario similar al que se aplica en Estocolmo, si bien en la capital sueca los fines de semanas, festivos y el mes de julio quedan exentos.

Con todo se contemplan una serie de exenciones y bonificaciones. En la ciudad londinense, por un lado, se bonifica el 90% a los residentes de la zona restringida, y están exentos vehículos de personas con movilidad reducida, los de reparaciones y de asistencia en carretera, y los que tienen más de 9 asientos. Tampoco pagan los vehículos de emergencia ni los ciclomotores. En Estocolmo es algo similar: no pagan discapacitados, militares, emergencias, vehículos poco contaminantes, grandes autobuses y motocicletas.

Cámaras y multas

¿Cómo se controla todo esto y se obliga a pagar? Se puede activar el cobro automático del peaje, pero también se puede pagar previamente o domiciliar el cobro. En la ciudad británica, por ejemplo, el control se articula con más de 200 cámaras que se encargan de grabar las entradas, salidas y algunos puntos internos de la zona delimitada durante el horario fijado. Mientras unas cámaras en blanco y negro capturan las matrículas, otras en color graban imágenes "contextuales" de los vehículos. 

El sistema cruza estas imágenes con las bases de datos y comprueba si el vehículo ha pagado. Si no lo ha hecho, se remite una notificación para que abone el peaje por el acceso, y si no se hace en tres días, se convierte en una multa de 180 libras (213 euros) -la mitad si se abona en las dos semanas siguientes-. En el caso de Suecia, la sanción asciende a 500 coronas (menos de 47 euros).

Lo cierto es que en cuanto al área metropolitana de València, el plan de movilidad de la Generalitat Valenciana no deja claro qué sistema se aplicaría: "El sistema deberá estudiarse en detalle, tanto en cuanto a las afecciones como los beneficios que generarían a la ciudadanía y administraciones metropolitanas". Ahora bien, se aplicaría en el período de una década pero siempre que se hayan desarrollado "las necesarias infraestructuras mínimas de transporte público" para "dotar de alternativa de movilidad a la ciudadanía que actualmente se desplaza en transporte privado".